La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) determina si los productos engañan (o no) a los clientes, así como qué tan nutritivos resultan, esto a través de sus análisis publicados en la Revista del Consumidor. Y sobre las galletas saladas reveló que algunas marcas contienen un ingrediente que puede resultar adictivo; conoce de cuál se trata y en qué productos está presente.
La dependencia hizo un análisis de calidad a las diferentes galletas (dulces y saladas) que se venden en México. En total fueron 48 productos analizados, donde se determinó que ofrecieran información completa a los consumidores, así como su contenido de: proteína, grasa, carbohidratos, calorías, azúcares y hasta sodio.
¿Qué marcas de galletas saladas pueden resultar adictivas, según Profeco?
En las galletas saladas, la Profeco detectó la presencia de jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF), un ingrediente que "se asocia con que la persona que lo consume no siente saciedad al momento de ingerir un alimento o bebida que lo contenga, por lo que sigue comiendo", según determinó el mismo organismo.
Marcas de galletas saladas que pueden resultar adictivas*:
- Crackets.
- Saladitas.
- Golden Hills Crackers.
- Golden Hills Saladas.
- Nabisco Ritz.
*Según el estudio de la Profeco publicado en la Revista del Consumidor de febrero de 2023
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En marcas como Golden Hills Saladas, la dependencia encontró que se incluyeron 6.5 gramos de azúcares por cada 100 gramos de producto y el empaque no los declara. Por su parte, las Crackers de Golden Hills ostentan hasta cuatro sellos de advertencia por exceso de azúcares, calorías, sodio y grasas saturada.
Otras marcas como Milena Cracker contiene hasta un 35 por ciento más de la grasa declarada, según la Profeco, por lo que fue considerado como un producto que no ofrece información veraz a las y los consumidores. Pero contrario a las otras marcas, no contuvo jarabe de maíz de alta fructosa entre sus ingredientes.
¿Por qué el jarabe de maíz de alta fructosa puede dañar tu salud?
El experto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Francisco Javier Gómez Pérez, detalló que el jarabe de maíz de alta fructosa (JMAF) aumenta el riesgo de padecer diabetes. Aparte de que también eleva el nivel de ácido úrico, incrementa los triglicéridos, la presión arterial, aparte de que puede ocasionar hígado graso y daño renal.
El jarabe de maíz de alta fructosa no sólo se encuentra en las galletas saladas, sino también en otros productos industrializados como refrescos, pasteles, jugos, barritas y cereales. Una de las consecuencias de este ingrediente es que elimina la sensación de saciedad, remarcó el especialista en un artículo publicado por la Gaceta UNAM.
Por su parte, Francisco Leri, un investigador de la Universidad de Guelph, en Canadá, determinó que el jarabe de maíz de alta fructosa resulta adictivo, ya que animales de laboratorio desarrollaron una preferencia por los alimentos dulces. Así que si consumes galletas saladas, procura hacerlo con moderación.