Estamos en plena temporada de calor, y además de las intensas temperaturas que se registran en gran parte del país, otra cosa característica de esta época son las frutas de temporada. Dos de las populares en este tiempo son la tuna y la pitaya ¿las has probado?.
Su apariencia similar, e incluso sabor, pueden generar confusión entre los consumidores despistados, que tal vez creen se trata de lo mismo. Debido a esto, te diremos cuáles son las diferencias entre ambas y características de cada una.
Propiedades de la tuna
La tuna es el fruto de los nopales, esa verdura tan típica y popular en nuestro país. Según información del Diccionario Gastronómico de México, pertenecen a las cactáceas del género Opuntia
Hay muchos tipos de tuna, como la roja y la verde, que es la más común, y como bien debes saber, tiene muchísimas propiedades que pueden ayudarnos a nuestra salud. Algunas de ellas, que resaltó el Gobierno de México en su sitio web, son las siguientes:
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- Ayuda a disminuir los niveles de colesterol
- Reduce la producción de ácido gástrico
- Alivia el malestar producido por úlceras
- Tiene una gran cantidad de fibra, y ayuda a regular el nivel de azúcar en la sangre
- Es baja en calorías, por lo que es perfecta para cualquier régimen alimenticio
Propiedades de la pitaya
La pitaya es una fruta que proviene de Centroamérica y México, y también pertenece a la familia de las cactáceas.
Entre sus propiedades está que son ricas en vitamina C, y B, además tienen potasio, hierro, calcio y fósforo. La mejor parte es que son bajas en calorías, y como tienen mucha fibra, ayudan a la digestión, esto según lo destacado por el Gobierno de México.
Ahora, sobre las diferencias, es, obviamente, el color, pero también las semillas, pues la de las tunas son un tanto más duras, mientras que de la pitaya son muy suaves.
Ambas tienen un sabor muy dulce, sin embargo, otra de sus distinciones, es que la primera tiene una consistencia dura, casi como una pelota, y la segunda es más blanda.