El atún es quizá el pescado que más fácil podemos conseguir debido a que lo podemos encontrar en casi todas las tiendas y supermercados en su versión en lata, pero ¿qué tan saludable es comerlo? Te contamos más sobre sus características nutritivas en el Día Mundial del Atún.
Pero este pescado también se puede adquirir y consumir en su presentación fresca, como cualquier otro alimento del mar que se vende en las marisquerías.
Y es que es mejor ingerir este alimento fresco que en conserva, pues en el segundo caso se le añaden algunos aditivos cuando se enlata, de acuerdo con lo que señaló Leyla Juri, académica de la Escuela de Nutrición de la Universidad Católica de Maule, a la propia UCM.
¿Qué tan saludable es comer atún? Esto dicen expertos
Aún así, el atún enlatado o fresco es un producto que se considera saludable, indica la especialista Juri y marcas del producto como Dolores.
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“En la versión natural este pescado azul es uno de los alimentos que más proteínas tiene, unos 22 gramos de proteína por cada 100 gramos, en el caso de la lata de atún podría catalogarse como un producto procesado saludable, hay dos factores a tener en cuenta para su consumo, el mercurio y la sal", precisó la académica.
Por su parte Dolores, empresa que se dedica a la venta de este alimento, indica que el atún tiene los siguientes beneficios:
- Fuente de proteínas.
- Grasas esenciales como los Omega 3.
- Vitaminas A, B y D, así como minerales: calcio,yodo, zinc, hierro y selenio.
- Ayuda a la salud ante cardiopatías coronarias.
- Beneficia al desarrollo del cerebro y el sistema nervioso en niños.
Aunque la experta de la UCM indica que cuando se envasa en la lata, se reduce el aporte de calcio y potasio en el producto del mar, mientras que el sodio aumenta.
Los especialistas de la Secretaría de Salud (Ssa) de México indican que los camarones, el atún enlatado claro o el salmón son los que menos cantidad de metilmercurio tienen y son los que debemos consumir; mientras que los que más contienen son los peces grandes, como el pez espada, el tiburón y la caballa.
La exposición durante la etapa fetal al metilmercurio, que se genera del mercurio del medio ambiente o de la industria, puede causar alteración en el desarrollo neurológico, la memoria, al pensamiento cognitivo, la capacidad de concentración, aptitudes motoras y espacio visuales de las niñas y los niños, indica la Ssa.
La dependencia mexicana señala que los nutriólogos recomiendan comer pescado, como atún, al menos dos veces a la semana.