Los boneless son una botana de pechuga de pollo empanizado y cocido muy deliciosos. comúnmente los venden en los restaurantes o en los bares como acompañamiento para hamburguesas o simplemente para disfrutarlos uno por uno. Gracias a su creciente popularidad, algunas marcas han lanzado sus propias versiones del alimento.
Recientemente, la organización civil El Poder del Consumidor analizó un ejemplar de 200 gramos de la marca Bachoco y advirtió sobre los excesos que este alimento contiene.
¿De qué están hechos los boneless?
De acuerdo con el reporte publicado en su portal oficial, el producto destaca dos sellos de excesos, tanto de grasas saturadas como de sodio. Además, este producto contiene glutamato monosódico, el cual es citotóxico y causante de muerte celular, y benzoato de sodio, que se ha demostrado que es cancerígeno, indican. En cuanto a sus ingredientes principales, los boneless Bachoco Búfalo contienen lo siguiente:
- Trozos de pollo
- Aceite vegetal
- Mezcla de chiles
- Sal
- Especias
- Azúcares añadidos
- Proteína de soya
- Harina de trigo
Por lo tanto, según el análisis realizado, se recomienda no consumir este producto debido a sus “altas cantidades de sodio, grasas saturadas y los aditivos añadidos”. En su lugar, sugieren preparar unos boneless de coliflor, ya que contiene una alta cantidad de fibra y agua y otras vitaminas.
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Lo que tienes que saber antes de comer pollo
El pollo también es presentado en alitas o en otro tipo de bocados que son deliciosos para muchos. Sin embargo, la forma en la que se cocina es importante para evitar la intoxicación alimentaria.
De acuerdo con los Centros de Control y Prevención para la Salud de Estados Unidos (CDC) el pollo debe cocinarse a una temperatura interna de 74 grados Celsius. Además, es importante mantener el pollo y sus jugos lejos de otras comidas o utensilios de cocina mientras se prepara ya que contiene bacterias como Campulobacter o salmonella y clostridium Perfingens.
Mientras el pollo esté bien lavado, bien cocido y bien servido, no representará problema alguno. Lo recomendable es utilizar, en la medida de lo posible, las menores cantidades de harina, grasas saturadas y sales en su preparación.