Hacer una carnita asada es fácil, lo difícil es encender el carbón para cocinarla, ya que puedes tardar demasiado si no tienes experiencia o la técnica correcta para lograrlo.
Para que no pierdas tiempo y dejes de sufrir, te revelamos el truco que te ayudará a prender el carbón fácil y rápido; quedarás asombrado al descubrir que no se necesita mucha ciencia para hacerlo.
Lo primero que tienes que hacer es formar una pirámide de trozos de carbón sobre pedazos de ocote y prenderle fuego a éste, la resina de la madera se esparcirá y ocurrirá la magia.
Cuando el carbón se encienda, coloca lo que no se ha pendido encima; en el momento que observes que éste tiene ceniza blanca, distribúyelo por todo el asador, explica el diccionario gastronómico Larousse.
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Durante el proceso mencionado puedes ayudar al carbón a encenderse echándole aire, ya sea con una secadora de cabello -si la tienes a la mano-, un soplador de tule o con la boca -la vieja confiable-.
Si no logras prender el carbón a la primera, no te desesperes, ni se te ocurra usar derivados de petróleo para encenderlo, porque echarás a perder la carne.
"Nunca pero nunca, uses un derivado de petróleo para encender el fuego de tu parrilla, eso le dará un mal sabor a tu comida", advierte Larousse Cocina.
¿Cuántos tipos de carbón existen?
Existen varios tipos de carbón vegetal en el mercado, dependiendo de la madera con la que se haya fabricado, como: encino, quebracho, roble y eucalipto.
El carbón de encino -uno de los más populares- es de alta calidad, proporciona un aroma y sabor exquisitos a los alimentos; el carbón de quebracho es conocido por su alta durabilidad y su poder calorífico, ideal para carnes grandes y gruesas; el carbón de eucalipto arde rápidamente y produce poco humo.
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