Entre los electrodomésticos más usados en las cocinas está el microondas, un invento que revolucionó la forma de cocinar los alimentos al disminuir el tiempo en que estos podrían ser ingeridos por las personas.
Sin embargo, y como en todo, existen algunos riesgos al utilizar esta herramienta, entre ellos la radiofrecuencia o la temperatura a la que los alimentos crudos son calentados o recalentados.
Aunque poca gente lo menciona, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) reconoce que sí existe una temperatura ideal a la que deben calentarse los alimentos en el microondas.
Como parte de su guía "Seguridad alimentaria para adultos menores de 30 años" señala que, por ejemplo, en el caso de la carne de cerdo o res, éstas deben estar a 62.7°C, por dentro tras tres minutos de haberse cocinado, al igual que el pescado y los mariscos.
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La temperatura ideal del microondas
Cuando un alimento se cocina en el microondas suele cocerse de forma rápida y dispareja. Por eso, la FDA señala que su temperatura interna debe estar en 74 °C una vez fuera del electrodoméstico. Para saber esto, las personas pueden ocupar un termómetro limpio que se introduzca en los alimentos.
El problema fundamental con el calentamiento del horno de microondas es que los alimentos no se cocinan homogéneamente; es decir, "se calientan de modo disparejo y pueden tener una tendencia a estallar", de acuerdo con Cancer Care. Además de que esta cocción dispareja puede "no matar los microorganismos peligrosos en algunos alimentos".
Otro de los aspectos que por lo general preocupan al público en general es la radiación que emiten estos aparatos para calentar la comida. Sin embargo, la organización asegura que estos productos suelen ser bastantes seguros, el problema sería la forma en la que se utilice esta herramienta.
Por ejemplo, hay ciertos tipos de plásticos, como el dietilexil adipato, que no se recomienda usar en el microondas, pues pues "se pueden filtrar dentro de los alimentos".