Cuando es día de descanso, y toca quedarnos en casa, o mejor aún, si eres de esos afortunados que hace home-office, a veces solo quieres estar cómodo y por eso decides no quitarte la pijama para nada. Sin actividades sociales a la vista, no debería representar mayor problema el hecho de estar en casa con la ropa que usamos para dormir, ¿verdad?.
Y pues permítenos decirte que parece ser que no funciona así. Estudios han revelado que, en realidad, este hecho que podría parecer inofensivo, sí que lo es. Y la principal razón se debe a la cantidad de bacterias que se acumulan conforme pasa el tiempo.
La experta de la escuela de la London School of Hygiene & Tropical Medicine, Sally Bloomfeld, dijo al medio Daily Mail que las pijamas están todo el tiempo contra nuestra piel, que constantemente está desprendiendo células.
Y aunque explicó que todos tenemos organismos que no son dañinos, esto cambia si logran introducirse en áreas equivocadas. “Muchos portamos la bacteria estafilococo, que puede causar infecciones si se meten en cortes y moretones (…) si entran en el tracto urinario pueden causar una infección como cistitis”.
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Además alertó que aunque te quites la pijama que ya usaste todo el día, o todo una semana, podrías “mudar” los microbios a otras prendas de ropa, y por consiguiente, seguirás en alerta de contraer una infección.
¿Cada cuánto debo lavar mi pijama?
Sally Bloomfeld considera que lo ideal es que laves la pijama al menos una vez, y de esta manera, podrías asegurar que las bacterias se eliminen. No obstante, toma en cuenta que lo ideal es no repetir pijama por largos periodos de tiempo.