Existen alimentos cuya composición y sabor cambian en caso de que los metas a electrodomésticos como el horno de microondas, pero ¿ocurre lo mismo cuando pasan mucho tiempo en el refrigerador? Una de las creencias más arraigadas es que existe el llamado 'sabor a refri' y a continuación te decimos qué es lo que ocurre.
Cada día, las personas consumen alimentos que necesitan estar dentro del refrigerador sí o sí, por ejemplo, una pizza no puede pasar más de un día a la intemperie, debido a que puede desarrollar bacterias y sus ingredientes como el queso pasarán a tener un proceso de fermentación, pero si pasa mucho tiempo ¿cambia su sabor?
¿Existe el 'sabor a refri'?
El 'sabor a refri' sí existe y esto se debe a varios factores, el primero es que hay alimentos en estado de descomposición y esos olores son absorbidos por todas aquellas comidas que se encuentran en buen estado, de acuerdo con el sitio Larousse Cocina. Por lo cual, de manera cotidiana, es recomendable sacar todos los productos que estén echados a perder.
Otros factores que generan el 'sabor a refri' son los envases de plástico mal lavados y que se usan para guardar alimentos, ya que este se impregna al contenido. Y la tercera causa tiene que ver con la limpieza del mismo electrodoméstico, ya que si el congelador, las charolas o hasta el escurridor empieza a despedir olores fétidos, estos pasarán a los alimentos.
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Limpiar el refrigerador es una labor que se debe realizar una vez al mes... por lo menos, pero marcas como Samsung recuerdan que la limpieza general se debe realizar una vez por año, es decir, desarmar todos los componentes del electrodoméstico (desde las parrillas hasta las bandejas) y dejarlas remojando en agua tibia para que no tengan malos aromas.
¿Cómo evitar el 'sabor a refri' en los alimentos?
La limpieza constante es una de las maneras de evitar el llamado 'sabor a refri' en los alimentos, pero no la única. Recuerda desechar todos los alimentos que lleven más tiempo del debido, sin importar si se encuentran guardados en un tupper, bolsas herméticas, papel aluminio o frascos de vidrio.
Los alimentos cocinados deben taparse de manera adecuada, sobre todo si se trata de pescados y mariscos, pues dicho aroma se puede impregnar muy fácil en otras comidas. El escurridor del congelador, las bandejas y otras partes del refrigerador deben tallarse con jabón y enjuagarse con agua tibia.
Productos como los humidificadores para refrigerador pueden ayudar para que los alimentos no generen un mal aroma, pero también se puede dejar un frasco con bicarbonato de sodio abierto al interior de una de las parrillas, esto no sólo evitará que la comida adopte un 'sabor a refri', sino a que todo el aire al interior sea más fragante.