Si durante esta época de frío te enfermaste y estás tomando antibióticos, hay algunos alimentos que no debes comer en tus cenas de Navidad, Año Nuevo y en general, de acuerdo con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Y es que durante estas fechas es frecuente que las personas padezcan enfermedades respiratorias causadas por las bajas temperaturas, lo que podría hacer que las celebraciones te sepan diferente.
Recuerda que en caso de tener síntomas no te debes automedicar y es mejor que acudas con una persona especialista en la salud para que te recomiende el tratamiento que debes seguir.
¿Qué alimentos no debes ingerir cuando estás en un tratamiento de antibióticos?
En caso de que estés tomando antibióticos o te los hayan recetado, la Cofepris señala que no debes comer los siguientes alimentos:
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- Queso
- Yogurt
- Leche
- Lácteos
- Col rizada
- Brócoli
- Frijoles de soya
- Acelgas
- Espinaca
- Alimentos ricos en calcio
"Ya que la ingesta de antibióticos junto a estos alimentos disminuye la absorción del principio activo del medicamento. A este proceso se le conoce como interacción entre alimentos y medicamentos debido a que el consumo de ciertos alimentos puede alterar la forma en que el organismo responde y asimila determinados medicamentos", explicó la Cofepris.
Esto significa que no podrías saborear la tradicional ensalada de manzana, debido a que uno de sus ingredientes es la crema.
¿Puedo beber alcohol mientras tomo medicamentos?
Tampoco debes beber alcohol cuando estés tomando alguna clase de medicina, porque esto puede disminuir la eficacia del tratamiento médico.
Así es que siempre pregúntale a tu doctor o doctora qué alimentos puedes consumir mientras estás en tratamiento de antibióticos o si te está recetando cualquier otro medicamento, para que así te cures lo antes posible y puedas disfrutar de mejor manera esta Navidad y Año Nuevo.
Recuerda que durante esta temporada de invierno debes cuidar principalmente a los niños de entre 6 meses y 5 años de edad, las personas adultas mayores, las mujeres embarazadas, así como quienes padecen enfermedades crónicas, debido a que son más propensos a contraer enfermedades.