Las lagañas, también conocidas como "rheum" o "dormiola", son esas pequeñas partículas de mucosidad seca que se acumulan en los ojos mientras dormimos. Aunque su presencia no suele ser motivo de preocupación, pueden resultar molestas e incómodas al despertar. Afortunadamente, existen varias medidas que puedes tomar antes de dormir para reducir su aparición.
En este artículo, te compartiremos algunos consejos para evitar las lagañas y tener una mañana más fresca y despejada.
Evita las lagañas con estos tips
1. LIMPIA TUS OJOS ANTES DE DORMIR
Una de las formas más efectivas de prevenir la acumulación de lagañas es limpiar tus ojos antes de acostarte. Puedes hacerlo utilizando una solución salina estéril o un suero fisiológico. Simplemente vierte unas gotas de la solución en el interior de tus párpados y parpadea suavemente para distribuirla por toda la superficie ocular. Luego, retira el exceso con un pañuelo de papel limpio o una gasa estéril.
2. EVITA TOCARTE LOS OJOS DURANTE EL DÍA
La acumulación de lagañas se produce principalmente por la producción excesiva de lágrimas durante el sueño y la falta de parpadeo para eliminarlas. Para reducir este problema, es importante evitar tocarse los ojos durante el día, ya que esto puede transferir bacterias y suciedad a los párpados y causar más producción de lágrimas. Lávate las manos con frecuencia y evita frotarte los ojos innecesariamente.
3. MANTÉN TUS PÁRPADOS LIMPIOS Y LIBRES DE MAQUILLAJE
El maquillaje de ojos, como el rímel y el delineador, puede obstruir los conductos lagrimales y contribuir a la formación de legañas. Antes de irte a la cama, asegúrate de retirar todo el maquillaje de tus ojos utilizando un desmaquillante suave y agua tibia. Además, es importante mantener tus párpados limpios y libres de cualquier residuo de maquillaje que pueda quedar. Puedes hacerlo con la ayuda de una solución de limpieza facial o con un paño húmedo y suave.
4. HUMIDIFICA EL AMBIENTE
El aire seco puede provocar una mayor sequedad en los ojos y estimular la producción de lagañas. Para contrarrestar este efecto, utiliza un humidificador en tu habitación para aumentar la humedad del ambiente. Esto ayudará a mantener tus ojos hidratados durante la noche y reducirá la formación de legañas.
5. CONSULTA A UN PROFESIONAL DE LA SALUD VISUAL
Si experimentas una producción excesiva de legañas o sufres de otros síntomas o molestias en los ojos, es recomendable que consultes a un profesional de la salud visual, como un oculista o un optometrista. Ellos podrán evaluar tu condición y brindarte un diagnóstico preciso, así como recomendaciones específicas para tratar y prevenir la formación de lagañas.
En resumen, limpia tus ojos antes de acostarte, evita tocarte los ojos durante el día, mantén tus párpados limpios y libres de maquillaje, humidifica el ambiente y, si es necesario, consulta a un profesional de la salud visual. ¡Dile adiós a las lagañas y despierta con una mirada clara y revitalizada cada mañana!