Uno de los aspectos más importantes para determinar la calidad del whisky es la edad. De hecho, este factor puede influenciar el precio de una botella, así que aquí te explicamos de qué se trata para que sepas elegir el mejor al momento de ir de compras.
La edad es el tiempo que el licor pasa en contacto con la madera: desde que es ingresado al barril donde lo almacenan, hasta que se vierte a una botella. Es decir, sus años de añejamiento.
Gracias a esto puede variar su precio, ya que entre más viejo sea mejor sabor tiene, según los expertos. Es por eso que los coleccionistas pagan grandes cantidades por adquirir una botella antigua.
¿En qué afecta la edad a una botella de whisky?
No afecta en nada, pero los especialistas consideran que sí influye en su sabor. Por ejemplo, en Escocia no se considera whisky a un licor que no ha pasado por un mínimo de tres años y un día de envejecimiento.
Te podría interesar
Y es que el contacto con la madera provoca que se alteren los ingredientes como el azúcar; en consiguiente se modifica la satisfacción del paladar.
Así que ya sabes que la edad del whisky sirve como diferenciadora entre un sabor y otro. Algunos expertos consideran que la mejor calidad se alcanza a los 12 años, aunque hay botellas más viejas, que pueden pasar de los 30.
¿Cómo medir la edad de un whisky?
Existe otro aspecto a tener en cuenta al momento de saber el añejamiento, procedimiento también conocido como aging, de esta bebida alcohólica. El aging deja de avanzar en el momento en que el licor se envasa en la botella.
Es decir, que si un whisky envejecido por tres años es embotellado, seguirá siendo un whisky de tres años aunque pase el tiempo en una bodega.