En los productos que consumimos cada día pueden existir microorganismos o insectos, esto debido a fallas en el proceso de elaborarlos, guardarlos o trasladarlos, tal es el caso de los ácaros que se presenten las piezas de jamón. El pan puede ser infestado por pequeños insectos conocidos como gorgojos, a continuación te decimos qué son y si son un riesgo para tu salud.
Los gorgojos son insectos de la familia de los coleópteros, a la que también pertenecen los escarabajos, y suelen infestar cereales como el arroz o la avena, además de leguminosas como los frijoles. Pero los del pan son distintos, aunque igual de inofensivos que sus 'primos', pero se recomienda no consumirlos.
¿Qué es el gorgojo del pan?
Con apenas 3.5 milímetros de largo, el gorgojo del pan es un insecto de color café que suele vivir en los productos almacenados en la despensa, como es el caso del pan. Una peculiaridad de los machos es que pueden volar (y causar sustos como las cucarachas), además de que son atraídos por la luz.
Estos insectos buscan el pan u otros productos almacenados, como la harina, para reproducirse y colocar sus huevecillos, los cuales son de color blanco: cada pareja procrea de cuatro a seis larvas. Al igual que muchos invertebrados, buscan los sitios cálidos y con humedad para proliferar.
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Se cree que este insecto es originario de Sudáfrica y desde ahí se esparció a todo el mundo. No sólo se alimenta de 'pancito', sino también de otros productos como hierbas, harina, galletas, condimentos, papel, cartón y hasta medicamentos; estos ejemplares suelen crear plagas en las droguerías y/o farmacias.
¿Cómo evitar que el pan se llene de gorgojos?
El pan, la harina y otros productos infestados por gorgojos son comestibles, debido a que estos insectos no son venenosos ni representan un riesgo. Sin embargo, esto no evitará que la plaga se termine y es posible que busquen nuevos objetivos, como las pastas o los condimentos que almacenas en la alacena.
Para deshacerte de los gorgojos del pan, lo primero es revisar cada uno de los productos y separar los que sí tienen de los que no; en el caso del pan se puede poner en un horno a 60 grados, con la finalidad de matar a los especímenes y los huevos que hallan colocado. Si se trata de la avena, se puede hornear o lavar y posteriormente colar.
Otro consejo es poner tierra de diatomeas en las esquinas de la casa, ya que se trata de un insecticida natural a base de algas, que es mortal para los gorgojos del pan y otros insectos. La limpieza de los estantes o la alacena, así como no conservar productos añejos serán fundamentales para evitarlos.