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Perritos: estas son las enfermedades que pueden sufrir los pugs

Los pugs son una raza de perros que requieren de cuidados especiales para no padecer enfermedades. En este Día Mundial del Perro te contamos. 

Los pugs pueden desarrollar varias enfermedades a causa de su fisonomía. Créditos: Juan Carlos García
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Dentro de las razas de perritos que más enfermedades sufren hay un espacio para los pugs, 'lomitos' que por su fisonomía y morfología suelen ser víctimas de varios padecimientos. A continuación te decimos cuáles son los males más comunes en estos pequeños 'amigos peludos' y cómo prevenirlas. En este Día Mundial del Perro te contamos. 

Los pugs son una raza bastante distinta a otros perros y eso se nota hasta en su cráneo, esto se da porque son braquicéfalos, es decir, especies de cara chata o aplanada. Esta condición ha hecho que padezcan varias enfermedades, sobre todo respiratorias y oculares; no obstante, un ejemplar sano tiene una esperanza de vida de hasta 15 años.

¿Qué enfermedades pueden sufrir los pugs?

La cara aplanada de los pugs los hace susceptibles a enfermedades respiratorias, entre los que se encuentra el síndrome de obstrucción de las vías respiratorias braquicéfalas (BOAS, por sus siglas en inglés), lo cual significa que padecen dificultades para inhalar y exhalar con facilidad, esto también se debe a que cuentan con una tráquea más estrecha en comparación con otras razas.

Un pug sano puede llegar a vivir hasta 15 años (Especial)

Las enfermedades oculares también son comunes en los pugs, debido a que el pelo del pliegue nasal puede ocasionarles desde úlceras corneales hasta el padecimiento de ojo seco, un padecimiento que produce molestias y hasta lesiones en las córneas de los 'lomitos'. También padecen infecciones en el denominado tercer párpado, el cual tienen los perros, pero no los humanos.

Una de las principales características de esta raza de perro es su piel arrugada y surcos en todo su rostro, por lo que el propietario debe procurar que el ejemplar tenga una adecuada higiene, de lo contrario, un pug puede desarrollar dermatitis en los pliegues. Esta misma condición los hace propensos a desarrollar tiña, un hongo muy infeccioso en el pelaje y piel de los 'lomitos'.

El cariño que muchas personas le tienen a sus mascotas, en ocasiones, les lleva a sobrealimentarlas, algo que es una mala idea en los pugs. Cuando un ejemplar de esta raza está más 'pachoncito' de lo normal (es decir, tiene obesidad), puede desarrollar problemas en sus patas y articulaciones, lo cual le ocasionaría lesiones.

Es importante que los pugs no coman en exceso y se les hagan los estudios pertinentes para detectar la displasia de cadera, un padecimiento que suelen tener estos perritos a causa de que el fémur y la cadera no encajan de forma correcta. Esto les puede ocasionar problemas para caminar de manera correcta.