Los perritos son parte fundamental de nuestro hogar, pues quien tiene la fortuna de tener uno en casa puede estar de acuerdo en que es la mejor terapia y el mejor compañero que uno puede tener. Sin embargo, no todo es 'miel sobre hojuelas'.
Es complicado educar y enseñar los ‘modales citadinos' a un 'lomito'; no obstante, esto es necesario para tener una sana convivencia, no solo con nosotros si no con las personas que llegan a visitar nuestra casa.
Por ello, te contamos qué puedes hacer para ayudar a que tu perro no te muerda a ti o a tus visitas.
Esto debes hacer para que tus perritos no muerdan
Pese a que son animalitos, los perros son muy entendidos, si hablas con ellos y explicas con ejemplos como deben comportarse, tus mascotas podrán comprenderte y actuar como lo deseas.
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De acuerdo con Red Canina, es importante que el perro sienta confianza del recién llegado, por lo que será necesario que olfatee a la visita, ya sea en las manos o en las piernas y que, además, éste le dé un juguete o premio.
Es importante indicarle esto a la visita y si a ellos no les gustan los perros, debes instruirles que aún así deben dejarse oler por el 'lomito' al llegar.
Otra cosa que puedes hacer es anticipar un paseo al perro antes de la llegada de las visitas, con el objetivo de liberar el estrés. Esto hará que el perrito se controle con más facilidad.
Si al recién llegado no le gustan los perros o el perro se pone a ladrar en un primer momento, lo mejor es ignorarle y actuar con naturalidad, sin regañarle ni mandarle callar.
Y, ¿cómo evito que mi perro me muerda?
Antes de todo, es necesario que proporciones a tu perrito algún objeto para que mordisquee y satisfaga su necesidad.
Sin embargo, asegúrate de que sea un juguete adecuado para él, que no contenga productos tóxicos y sea de tamaño adecuado para evitar que se ahogue.
Cada vez que muerda otra cosa, dile ¡no! de manera firme, quítale lo que está mordiendo y dale su juguete. Deberás repetir el proceso varias veces, hasta que lo aprenda.
También, cuando te llegue a morder, quéjate, emite un gruñido con el que puedan identificar que te está lastimando. Este ejercicio, al igual que el anterior, debes repetirlo constantemente para que tu 'lomito' comience a asociar la mordida como algo que te lastima.
De igual manera, evita que las mordidas sean parte de cualquier juego, pues si no lo vas a confundir.
Recuerda que el proceso de aprendizaje lleva un tiempo, pero, poco a poco, observarás que tu perrito comienza a entender las órdenes y señales que has comenzado a implementar.