Es muy común que el Día de Muertos la gente se pinte la cara para caracterizarse de algún personaje al acudir a pedir dulces o a una fiesta de disfraces. Pero, muy pocas personas saben lo que en realidad pueden llegar a afectar estas pinturas faciales a la salud.
Hay incluso maquillajes especializados en niños y adolescentes, pero también tienen perjuicios si es que están fabricados con sustancias dañinas. Por eso antes de comprarlos o ponérselos en la cara, hay que tomar en cuenta algunos aspectos.
Porque, en caso de no tener cuidado, podría provocar irritación en la piel o alergias. Eso sin contar que las alergias podrían ser graves para ciertas personas.
¿Cuáles son las sustancias de las pinturas de Día de Muertos que dañan la piel?
Los cosméticos suelen tener metales pesados, que pueden ser tóxicos para la piel en cantidades grandes. Así que antes de adquirir cualquier pintura hay que fijarse que no contenga lo siguiente:
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- Arsénico.
- Cadmio.
- Mercurio (cloruro mercurioso o calomel).
- Plomo (Kohl o surma).
- Látex.
- Cobalto.
- Níquel.
¿Cómo evitar que las pinturas de Día de Muertos me afecten la piel?
Si bien el daño será irreparable si una gran cantidad de sustancias tóxicas toca la piel, sí hay maneras de evitar otros daños, como las infecciones. Así que estos son algunos consejos.
- Probar el maquillaje con una pequeña porción en otra parte del cuerpo que no sea la cara.
- No compartir maquillaje con otras personas.
- No usar el producto si tiene mal olor.
- Evitar almacenar los productos en lugares muy calientes o húmedos.