¿Te consideras una persona ambiciosa? Si tu respuesta es afirmativa más vale que tengas cuidado, pues existe una alma en pena conocida como El Charro Negro que deambula por el mundo en busca de almas que llevarse.
Se trata de una de las leyendas más populares en México. Se denomina Charro Negro a este espectro debido a que se presenta montado en un caballo negro de cuyos ojos parece salir fuego, contó Gina Avilés en La Mano Peluda para Grupo Fórmula.
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Pero El Charro Negro no fue siempre un demonio. Se cuenta que fue un hombre con necesidades económicas quien, en un momento de desesperación, decidió vender su alma al Diablo sin pensar en las terribles consecuencias.
En el momento en que el Diablo cumplió el trato y le dio el dinero, el hombre trató de esconderse, acción que molestó al rey de las tinieblas. Al descubrir que trataba de engañarlo, el demonio le dijo que, si bien en un principio esperaría a que muriera para llevarse su alma, al tratar de "jugarle chueco" se lo llevaría en ese mismo instante. Pero eso no fue todo, pues también, como castigo, lo sentenció a vagar por el mundo consiguiendo almas ambiciosas para tentarlas.
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Desde entonces, el Charro Negro se dedica a cabalgar por carreteras y zonas poco transitadas en busca de persona solas para ofrecerles sacos llenos de monedas de oro y hacerlas caer en tentación como a él le ocurrió.
Aunque frecuentemente ofrece grandes riquezas para tentar a las personas, también se aparece a mujeres, a quienes invita de una manera muy amable a subirse a su caballo, pero no debes aceptar, pues una vez arriba , tu alma será llevada al inframundo.