Uno de los sonidos que más alegría le dan a las personas es cuando el cajero está a punto de entregarles tus billetes: no tiene melodía y su ritmo es muy repetitivo, pero suena casi como una canción. Aunque ¿cuándo llegó el primer cajero automático a México y dónde estaba? Te contamos.
Y es que hace poco más de medio siglo para retirar dinero se tenía que ir directamente a la ventanilla, pero en el año de 1939 se instaló en el City Bank de Nueva York el que sería el primer intento de uno de estos aparatos, inventado por George Simjian. Pero la gente mostró poco interés al respecto.
Posteriormente el primer cajero automático al que se le podía poner el PIN (Personal Identification Number o número de identificación personal), inventado por John Shepherd-Barron, fue instalado en junio de 1967 en el banco Barclays, en Londres. Su primer usuario fue el actor Reg Verney.
¿Cuándo llegó el primer cajero automático a México y dónde estaba?
El primer cajero automático llegó a México en el año de 1972 de la mano de Banamex, con lo que también se convierte en el primero en América Latina.
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El aparato fue instalado en Plaza Satélite, que se ubica en Naucalpan, Estado de México, pero actualmente forma parte de los tesoros de la bóveda de Banamex, de acuerdo con información de Expansión.
Actualmente hay 60 mil 374 cajeros distribuidos en todo el país, tanto dentro como fuera de sucursal, donde la Ciudad de México es la entidad con la mayor cantidad de estos dispositivos al tener 8 mil 458, de acuerdo con datos del Banco de México (Banxico) a septiembre del 2022.
Cuidados al retirar dinero de un cajero automático
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financiero (Condusef) recomienda tener en cuenta los siguientes puntos al utilizar un cajero automático para retirar dinero:
- No acudas a cajeros solitarios, poco iluminados y que estén en lugares aislados, especialmente de noche.
- No pidas o aceptes ayuda de otras personas si el dispositivo falla.
- Revisa el aspecto del aparato para que detectes alteraciones o partes sobrepuestas y extrañas.
- No hagas caso de letreros o comunicados, ya que los bancos nunca piden información confidencial mediante ellos.
- Nunca compartas tu NIP y cámbialo con frecuencia.
- En caso de que la tarjeta se quede dentro, la cantidad solicitada no es la correcta o no te dieron el dinero, acude con un ejecutivo o llama a los números de asistencia que están en la máquina.
Se estima que en el mundo hay una red de más de 3 millones de cajeros automáticos.