Este martes se dio a conocer que durante julio, cuando iniciaron las vacaciones de verano 2022, la inflación anual se ubicó en 8.15 por ciento, una variación del 0.74 respecto al mes anterior y nuevamente en niveles récord desde hace más de 2 décadas.
Entre lo que más aumento de precio tuvo el mes pasado, tanto en su variación anual como en la mensual, estuvieron servicios relacionados con el turismo y las vacaciones de verano.
Entre estos están el transporte aéreo con una variación mensual de 5.2 por ciento, los servicios turísticos en paquete con alzas de 3.5 por ciento respecto al mes anterior y el menor de estos fueron los restaurantes con 0.9 por ciento a tasa mensual. Ello de acuerdo con un monitoreo de México Cómo Vamos y que se basa en cifras del Inegi.
Pero ahora que concluyó o está por terminar el ciclo de vacaciones de verano 2022, ¿ayudará a disminuir las presiones que impactan en los niveles de la inflación?
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El impacto de las vacaciones en la economía y la inflación
Por una parte, las compras que se dan en esta época del año, representan un aumento en la economía y empleos, por ejemplo, para el sector hotelero y restaurantero.
Esto, sumado a un deseo del consumidor por salir tras restricciones de actividades presenciales por la pandemia, tienen un impacto positivo para el sector, según explicó Luis Antonio Andrade, especialista en Economía de la Universidad La Salle.
Estos factores generan en una mayor demanda que impacta en el aumento de precios, por ejemplo, más personas que buscan boletos para un mismo vuelo o entrar al mismo restaurante:
“La demanda por parte de nosotros aumenta, y como la oferta sigue fija de alguna forma, inmediatamente se ve reflejada en un aumento de precios”, señaló.
Pero, señaló, se trata de un evento temporal, pues una vez que se retoman actividades fuera del periodo de descanso la demanda baja y tiende a haber un ajuste de precios. Situación que se percibe más hacia el otoño, explicó el experto.
“A finales de septiembre, principios de octubre, se suele volver a la normalidad y se ajustan los precios como estaban antes de las vacaciones”, indicó.
Sin embargo, este escenario de 'ajustes' no significa que el fin de las vacaciones tenga un gran impacto en los niveles de inflación, mismos que aún se prevén que sigan por encima de la meta del Banco de México que es de 3 por ciento (+/- 1).
Esto porque hay otros factores que provocan un alza de precios independientes al periodo vacacional, como falta de exportaciones de gas y cereales de Ucrania y Rusia por la guerra entre los 2 países.
Entre los productos que más presión ejercieron sobre la inflación en México estuvieron la papa y otros tubérculos, naranja, cebolla y tomate verde.
El especialista en economía señaló que ese aumento de precios también tiene que ver con el combustible y en ocasiones, situaciones de seguridad.
“Indirectamente de la guerra, el precio de estos insumos se afecta por costos del transporte para traer los productos, a esto hay que sumar nivel de violencia como el pago de derecho por producción, que se lo cobran al productor y a su vez los traslada al consumidor”, explicó.
En su variación anual el transporte aéreo aumentó en 8.3 por ciento, los servicios turísticos en paquete en 16.3 por ciento y los restaurantes casi 10 por ciento de acuerdo con datos del seguimiento de México Cómo Vamos; son cifras que a su vez reflejan una recuperación del sector impactado por la pandemia.
A pesar de los altos niveles de inflación que se han presentado en los últimos meses, incluyendo en periodo de vacaciones, especialistas y analistas financieros han coincidido que hacia el último trimestre del año esta podría comenzar a “ceder” y mostrar una baja; misma que podría seguir en meses siguientes.