A raíz de la invasión rusa a Ucrania el miércoles pasado, los precios de los energéticos aumentaron como parte de la incertidumbre por el conflicto, lo que impacta directamente en la gasolina.
Ello porque Rusia es uno de los principales productores de energéticos en el mundo, con 12 por ciento del petróleo y 16 por ciento del gas natural de todo el orbe. Y muchos países de occidente establecieron sanciones comerciales contra ese país, lo que obligará a concentrar la demanda en otras regiones.
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Así, la oferta se redujo, lo que mantiene una tendencia al alza de los precios del petróleo, principal insumo para la producción de gasolina.
En ese escenario, el gobierno mexicano tomó una medida para evitar que esta alza en el precio del petróleo llegara a los bolsillos de las familias mexicanas: aumentar el subsidio en el Impuesto Especial a Productos y Servicios (IEPS).
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"Desde hace semanas el IEPS ha servido de estímulo fiscal. Vamos a utilizarlo para un soporte que sirva para mantener el precio. O recibimos ese dinero en la Hacienda o se le carga al ciudadano. El IEPS se seguirá sin cobrar por parte del gobierno para que se mantengan los precios estos días", comentó la secretaria de Energía, Rocío Nahle, en entrevista con Óscar Mario Beteta para En los Tiempos de la Radio.
La funcionaria detalló que la exención es por ahora del 99 por ciento para la gasolina Magna, y se tratará de mantener en tanto que los precios sigan al alza; apenas el martes, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) dio la indicación a esa dependencia para que junto con la Secretaría de Hacienda estudien los siguientes pasos en relación con esta medida. En el caso de la gasolina premium y el diésel, el estímulo es de 77.46 y 78.64 por ciento respectivamente.
Desde mediados de febrero, los futuros del barril de crudo Brent rondaban los 94 dólares; sin embargo, desde la semana pasada saltaron hacia los 100 dólares tras el inicio del conflicto, mientras que esta semana se han mantenido por encima de los 110 dólares por barril.
En tanto que la mezcla estadounidense WTI tuvo un comportamiento casi idéntico, al pasar de 93 dólares en febrero a un salto a 99 dólares tras el inicio del conflicto; y este miércoles su precio ronda los 108 dólares por barril. La mezcla mexicana pasó igualmente de los 85 dólares a cerrar el martes 1 de marzo en un precio de 97.57 dólares por barril, su máximo nivel desde la segunda mitad de 2014.
Energía garantizada para México
En entrevista para Grupo Fórmula, Rocío Nahle señaló que ante la demanda de energéticos y el alza de sus precios en el mundo, México, como productor de petróleo, gasolina y electricidad, “tiene la fortuna de tener dos empresas del estado como es Pemex y como es la CFE porque son las balanzas del sector; nuestro trabajo en este gobierno es cuidar el equilibrio”.
Explicó que ambas empresas productivas del Estado brindan al gobierno la viabilidad de suministrar energéticos a todo el país sin depender de un mercado netamente privado, de ser así México estaría sujeto a los vaivenes de ese mercado, como ocurre en otras naciones.
Afirmó que ante ello la Agencia Internacional de la Energía (AIE) resolvió que algunos de sus países miembros liberen barriles de petróleo de sus reservas de emergencia para estabilizar el mercado interno y externo. En tanto, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) tiene un programa para restablecer la producción petrolera entre sus miembros e inyectará 400 mil barriles por día a la producción mensual. En el caso de México, agregó, existe un margen en cuanto a su producción petrolera que le beneficia.
Subrayó que por ese motivo nuestro país ha mantenido sin cambios las tarifas de gasolina y electricidad. Además, previó que habrá excedente petrolero porque hay un aumento en la cotización del petróleo en el mundo.