Si eres un apasionado de los volcanes en México, ya sea por motivos de estudio, deportes o simplemente por curiosidad, es importante saber que, más allá del Iztaccíhuatl, el Pico de Orizaba o el famoso Popocatépetl, existe una notable variedad de volcanes en la Ciudad de México (CDMX). Muchos desconocen que en la capital del país hay hasta ocho impresionantes formaciones volcánicas. Estos colosos no solo definen el paisaje urbano, sino que también tienen un profundo impacto en la historia y cultura de la región.
Hay que recordar que parte de la CDMX se encuentra en el Eje Neovolcánico, también conocido como Eje Volcánico Transversal, una cadena montañosa que conecta la Sierra Madre Occidental y Oriental, extendiéndose por varios estados, entre ellos Nayarit, Jalisco, Michoacán, Estado de México y, por supuesto, la Ciudad de México.
Volcanes CDMX fascinantes por sus paisajes
Entre los volcanes más conocidos de la capital se encuentran el Ajusco y el Xitle, aunque pocos saben que hay otros igualmente impresionantes. Estos colosos permanecen inactivos, pero siguen siendo fascinantes por su biodiversidad y sus paisajes majestuosos.
Volcán Ajusco
El Ajusco es, sin duda, uno de los volcanes más conocidos de la Ciudad de México. Ubicado en la alcaldía Tlalpan, su nombre proviene del náhuatl y significa “floresta de aguas”. Con una altura de 3 mil 930 metros sobre el nivel del mar, el Ajusco es el punto más alto de la capital mexicana. Parte del volcán está incluido en el Parque Nacional Cumbres del Ajusco, un espacio reconocido por su diversidad ecológica, con extensos bosques y pastizales que lo hacen ideal para el senderismo.
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Este volcán es hogar de una variada fauna, entre la que se encuentran especies como el conejo serrano, el coyote, la ardilla vientre rojo y el cacomixtle norteño. También es hogar de reptiles, aves como la aguililla cola roja, y una variedad de hongos como el Amanita muscaria.
Volcán Tláloc
El volcán Tláloc, ubicado en la alcaldía Milpa Alta, forma parte de la Sierra de Ajusco-Chichinautzin. Su altura alcanza los 3 mil 690 metros sobre el nivel del mar, siendo el segundo punto más elevado de la Ciudad de México.
En sus laderas crecen bosques de pino, encino y oyamel, creando un entorno ideal para actividades al aire libre como el senderismo.
Eso no es todo, destaca también por la fauna local que incluye al zacatuche, coyotes y ardillas, entre otros animales que habitan este ecosistema montañoso.
Volcán "El Pelado"
Con 3 mil 620 metros de altura, el volcán "El Pelado" se ubica también en la alcaldía Tlalpan y es uno de los volcanes más antiguos de la región. Aunque su última erupción fue hace aproximadamente 10 mil años, su imponente estructura continúa siendo un lugar interesante para los exploradores.
El nombre de este volcán proviene de la falta de vegetación en su cima, aunque está rodeado de densos bosques de pino y oyamel. Además, su fauna incluye teporingos, serpientes de cascabel y, en raras ocasiones, y rara vez se observan venados cola blanca.
Volcán Cuauhtzin
El volcán Cuauhtzin, con una altura de 3 mil 510 metros, se encuentra en la alcaldía Milpa Alta. Forma parte de la Sierra del Ajusco-Chichinautzin, y sus alrededores ofrecen excelentes oportunidades para el senderismo.
Es importante realizar estas excursiones con guías experimentados para garantizar la seguridad. La fauna local incluye gavilanes, zorros grises, lagartijas, y águilas de cola roja, así como tarántulas que habitan en las zonas rocosas.
Volcán Chichinautzin
Situado al sur de la Ciudad de México, el volcán Chichinautzin pertenece a la misma cadena montañosa que el Ajusco y el Cuauhtzin.
Con una altura de 3 mil 430 metros, este coloso se distingue por sus ríos de lava petrificada y su cráter, que ofrece vistas panorámicas impresionantes del corredor biológico que lo rodea. Su última actividad volcánica se registró hace aproximadamente 400 años.
En el Chichinautzin se han identificado 315 especies de hongos, de las cuales más de 80 son comestibles. También se han catalogado 10 especies de anfibios, 43 especies de reptiles, 1,348 tipos de insectos y arañas, y 237 especies de aves, con 36 exclusivas de la zona. Asimismo, se encuentran 5 especies de peces, 785 especies de plantas y 7 tipos diferentes de vegetación. Este ecosistema incluye además bosques de pino, oyamel y encino.
Volcán Xitle
Este volcán, de aproximadamente 3 mil 100 metros de altura, está situado en el sur de la capital, también en la alcaldía Tlalpan. Aunque su última erupción ocurrió hace mil 700 años, su lava cubrió áreas actuales como Tlalpan y Coyoacán, dejando una huella en la geografía y la historia de la ciudad.
Estas impresionantes elevaciones tienen paisajes únicos y fauna diversa que hacen de la capital un destino ideal para los amantes de la naturaleza y la aventura.
La fauna de esta zona incluye serpientes, águilas, halcones, zorrillos, tlacuaches y cacomixtles.
Volcán Tehutli
El volcán Tehutli, cuyo nombre significa "venerable señor", está ubicado al sur de la Ciudad de México, marcando los límites entre las alcaldías Milpa Alta, Xochimilco y Tláhuac.
Con una altitud de 2 mil 710 metros, este volcán tiene un significado cultural importante. Cada 3 de mayo, los habitantes de la zona suben a su cima para colocar una cruz en honor al Día de la Santa Cruz, como parte de sus tradiciones locales.
Volcán Tecuauhtzin y otros
El Tecuauhtzin, con una altura de 2 mil 640 metros, es el segundo volcán más alto de la Sierra de Santa Catarina, en la alcaldía Iztapalapa. Conocido también como el Cerro de las Tres Cruces, este volcán ha sido utilizado como fuente de extracción de piedra y arena en el pasado. Hoy en día, es un destino popular para caminatas y excursiones, accesible desde el pueblo de San Francisco Tlaltenco.
En esta misma sierra se encuentran otros volcanes importantes como el Xaltepec, el Guadalupe o El Borrego, y el Volcán La Caldera, todos ellos con alturas que superan los 2 mil 400 metros sobre el nivel del mar. Desde la declaración de la Sierra de Santa Catarina como Área de Conservación Ecológica en 1998, estos volcanes se han convertido en lugares ideales para el turismo de naturaleza.
Así que ya lo sabes, la Ciudad de México no solo es hogar de una vibrante vida urbana, sino que también alberga un vasto patrimonio geológico representado por sus volcanes CDMX. Desde el majestuoso Ajusco hasta el histórico Xitle, estos gigantes dormidos ofrecen una oportunidad única para quienes buscan aventuras al aire libre. Cada volcán, con su biodiversidad y paisajes impresionantes, añade una capa de riqueza natural a la capital, convirtiéndola en un destino seguro para los aventureros.