La Ciudad de México oculta sitios turísticos y de gran interés histórico, como los baños de vapor a donde llegó acudir la emperatriz Carlota, así como monumentos o esculturas que pueden pasar inadvertidos a todas y todos aquellos que no ponen la suficiente atención, tal es el caso de una cabeza de serpiente en plenas calles del Centro Histórico.
La serpiente fue uno de los animales que más significado tuvo para los aztecas y otras culturas prehispánicas que habitaron el Valle de México, pues estuvo relacionada con el poder y la buena fortuna. Diversas construcciones estuvieron decoradas con cabezas de estos reptiles y algunas estuvieron dedicadas a deidades.
¿Cuál es la cabeza de serpiente que seguro has visto?
En el primer cuadro de la Ciudad de México está la calle de Pino Suárez, la cual conecta a la plancha del Zócalo capitalino con la Calzada de Tlalpan. Entre los diversos edificios histórico que ahí se encuentran está el Museo de la Ciudad de México, el cual cuenta con una cabeza de serpiente incrustada en la base de su estructura, ¿pero cómo llegó a ese sitio?
Todo se remonta al año 1528, siete años después de la caída de México-Tenochtitlán, cuando Juan Gutiérrez Altamirano (primo de Hernán Cortés), construyó una casa en dicho sitio y, posiblemente, sobre las ruinas de la capital azteca. Para 1777, al arquitecto Francisco Guerrero y Torres se le encargó una reconstrucción del inmueble, de acuerdo con México Desconocido.
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Fue durante esa rehabilitación que hallaron una colosal cabeza de serpiente, pero decidieron no destruirla y fusionarla con la arquitectura barroca del periodo colonial, lo cual le dio un toque único al entonces Palacio de los Condes de Santiago de Calimaya. Todos estos elementos le llevaron a ser considerado patrimonio nacional en 1931 y ya durante el México independiente.
¿Y dónde está la cabeza de serpiente? Sí, aún se encuentra presente en la arquitectura del Museo de la Ciudad de México y la puedes ver si caminas rumbo a la plancha del Zócalo (o viceversa, si vas hacia Calzada de Tlalpan), pues se localiza en el cruce de Pino Suárez con la calle de República de El Salvador.
¿Qué dios azteca fue representado con una serpiente?
Quetzalcótal fue uno de los dioses aztecas más importantes de dicha cosmología y estuvo relacionado con los ofidios pues tal cual su nombre significa 'serpiente quetzalli' o 'serpiente emplumada'; aunque también fue representado como un dios de forma humana y que ejercía acción sobre los vientos.
De acuerdo con las leyendas aztecas, Quetzalcóatl fue vencido por otros dioses rivales y tuvo que huir hacia el este, a través del mar, pero volvería para reinar el mundo de los aztecas. Por eso, cuando los españoles llegaron, fueron confundidos con esta deidad, de acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
En el Templo Mayor, el único vestigio que queda de México-Tenochtitlán, existen varias cabezas de piedra que representan a serpientes, en especial a Quetzalcótal.