El Gobierno capitalino busca impulsar el ecoturismo y la conservación ambiental, por lo que trabaja en la reactivación de un parque natural ubicado en la alcaldía Tlalpan.
Se trata del Parque Ecoturístico La Cañada, que se localiza en el ejido de Magdalena de Petlacalco.
Julia Álvarez Icaza Ramírez, titular de la Secretaría del Medio Ambiente de la CDMX, enfatizó se trabaja en conjunto con la CONAFOR y la alcaldía de Tlalpan para fortalecer la infraestructura ecoturística y garantizar beneficios ambientales y económicos para la comunidad.
“La Cañada será un referente del ecoturismo en la Ciudad de México, un espacio donde la conservación y el disfrute de la naturaleza vayan de la mano, destacó la titular de la Sedema.
En los próximos meses se definirán los plazos para la reapertura del parque, que ofrecerá a los visitantes una experiencia única en uno de los bosques mejor conservados de la Capital.
¿Cómo es el parque La Cañada?
El Parque Natural La Cañada se caracteriza por ser de acceso gratuito y el parque más grande de la Ciudad de México que ofrece contacto extraordinario con la naturaleza.
Cuenta con más de un millón de metros cuadrados de bosque periurbano y 2.5 km del cauce del río Magdalena, último río vivo de la Ciudad de México.
El río Magdalena tiene una longitud de 28.2 km, de los cuales 14.8 km, se encuentran dentro de la microcuenca del río Magdalena; su escurrimiento promedio es de 0.67m3/s, y contribuye con la mitad del abastecimiento del agua superficial de la Ciudad.
Este río pasa por algunas de las zonas más importantes del sur de la Ciudad de México, desde la alcaldía Magdalena Contreras hasta la avenida Churubusco.
Su nacimiento es en el Cerro San Miguel, ubicado en una zona templada del Bosque de las Cruces. Baja por el parque nacional de Los Dinamos y posteriormente se integra a algunos pueblos de la alcaldía Magdalena Contreras.
En el parque La Cañada habitan especies como cacomixtle, conejo silvestre, búho cornudo, aguililla cola roja, gorrión zacatero, alicante de montaña, halcón cernícalo y zorro gris.
Si bien el proyecto cuenta con el acompañamiento de la Sedema, su mantenimiento depende en gran medida de aportaciones privadas de empresas, organizaciones y ciudadanos nacionales y extranjeros.