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Salvan a Jirafa Benito... y ahora van por Ely la elefanta que vive 'triste' en zoológico de CDMX

Ely es una elefanta que vive desde hace más de 10 años en el zoológico San Juan de Aragón al norte de la Ciudad de México.

Activistas que protestaron por la jirafa Benito ahora van por la libertad de Ely, una elefanta que vive desde hace más de 10 años en un zoológico de la CDMX.Créditos: Especial
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La Jirafa Benito pudo ser salvada y trasladada a Africam Safari... pero las y los activistas ahora van por Ely la elefanta, quien se encuentra 'secuestrada' en un zoológico de la Ciudad de México.

"Hoy por Benito y desde este momento por la elefanta Ely. Nuestra lucha no termina, salvemos a Benito se convierte desde hoy en el movimiento salvemos a Ely, esa elefanta secuestrada en el zoológico de San Juan de Aragón de la Ciudad de México", expresó la activista Perla de la Rosa.

Y es que fue gracias al movimiento Salvemos a Benito, que la jirafa que vivía en el Parque Central de Juárez, según activistas en condiciones deplorables, pudo ser trasladada a Africam Safari.

¿Quién es Ely la elefanta?

Ely es una elefanta que vive desde hace más de 10 años en el zoológico San Juan de Aragón al norte de la Ciudad de México.

Fue en el año 2012 cuando el zoológico rescató a Ely la elefanta de un circo, lugar en donde era golpeada y obligada a participar en el acto: subirse a templetes y al lomo de otros elefantes.

Aunque no tienen mucha información acerca del pasado de Ely, se cree que tiene entre 38 y 40 años. Además, sufre de artritis en la pata delantera derecha y una enfermedad en la piel llamada hiperqueratosis.

Redes

De acuerdo con activistas, aunque Ely fue rescatada del circo, el zoológico no le puede brindar el espacio adecuado para ella, pues un elefante africano puede recorrer en un día hasta 50 kilómetros y vive en manadas.

Debido al poco espacio con el que cuenta y a su soledad, activistas aseguran que la elefanta Ely tiene movimientos repetitivos incontrolados, se come sus propias heces y se ha hecho daño en los colmillos por estrellarlos en contra de los barrotes en repetidas ocasiones.