Un microsismo de magnitud 2.3 afectó a varias alcaldías de la Ciudad de México durante la noche de este miércoles y su epicentro fue en la alcaldía Magdalena Contreras, ¿pero alguna vez te has preguntado por qué no suenan las alarmas cuando un movimiento telúrico se origina de manera local?
Lo anterior se debe a que los 97 sensores con los que cuenta este sistema de alerta temprana se encuentran en los estados de Jalisco, Colima, Michoacán Guerrero, Oaxaca y Puebla, y su principal objetivo es detectar los sismos que se generan en la placa de Cocos. La Ciudad de México no se encuentra en los límites de dicha placa, pero si resiente los efectos de los movimientos telúricos.
De acuerdo con información del Sistema de Alerta Sísmico Mexicano (Sasmex), estos sensores fueron instalados desde el año 2012 y cuentan con un sistema de ingeniería electrónica, computación y comunicación altamente confiables. Si se percibe un movimiento en Michoacán, causado por la placa de Cocos, la información será enviada a la CDMX para poner sobre aviso sus habitantes.
Los criterios para que se active la alarma sísmica son los siguientes: un sismo mayor a la magnitud 5 que no ocurra a más de 170 kilómetros, un sismo superior a la magnitud 6 que se origine a más de 350 kilómetros y un sismo mayor a 5.5 que suceda a no más de 350 kilómetros, según Sasmex.
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En el caso del microsismo de esta noche no fue necesaria la activación de la alarma sísmica, pues no estuvo dentro del rango de los criterios establecidos por el Sasmex, De paso, el C5 recordó a la ciudadanía que las alertas no se 'disparan' cuando el epicentro es dentro de la misma CDMX.
El Gobierno de México busca ampliar la cobertura de este sistema de alerta temprana a entidades con riesgo sísmico, entre las que se encuentran Veracruz, Chiapas y la zona noreste de Oaxaca. Asimismo, hay planes para que todas las grandes urbes y poblados cuenten con este sistema y así salvaguardar a la población.
En caso de que un sismo se genere en la llamada placa de Cocos, las personas cuentan con entre 20 y 120 segundos de oportunidad para buscar una zona segura o ponerse a salvo ante el sismo. En la actualidad, este sistema beneficia a 25 millones de personas.