Los microsismos que ocurriron el 14 y 12 de diciembre pasados, así como los que hubo en mayo de este año con epicentro en la Ciudad de México no están relacionados con el surgimiento de un volcán en la capital, de acuerdo con Carlos Valdés, investigador de geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
El especialista detalló en entrevista con Denise Maerker para "Atando Cabos" que para que un volcán surgiera en la CDMX sería necesario que el epicentro de los sismos fuera hacia el sur, específicamente en la zona del Corredor del Chichinautzin y en los límites de la capital con Morelos, rumbo a Cuernavaca.
Los microsismos de 12 y 14 de diciembre tuvieron epicentro en las alcaldías Álvaro Obregón y Magdalena Contreras, de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional.
Esto se debe a que esa es una zona volcánica y si el epicentro de los microsismos se registra en esa zona, los movimientos telúricos sí podrían ser precursores del surgimiento de un volcán. También señaló que el número de temblores por día tendría que ser mayor, como cuando se formó el Paricutín que había de 200 a 300 por día.
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"Cosa que no vemos aquí y tiene relación con la presencia de fallas, es una cuenca, es estable, todo está lleno de montañas formadas del empuje de las placas tectónicas, las de Cocos y del Pacífico, todo repercute en el país. Son reacomodos", comentó.
Carlos Valdés explicó que la magnitud de los microsismos es mínima, pero el movimiento telúrico sí se puede sentir fuerte y eso tiene que ver con la intensidad con la que ocurren y su aceleración. Sin embargo, los temblores que se han registrado en la CDMX esta semana fueron de una duración menor.
Es normal que haya microsismos en CDMX
Además, el investigador en geofísica destacó que la presencia de microsismos en la CDMX no es un fenómeno extraño, sino que es común y es posible que pasen periodos largos sin movimientos telúricos, pero se presenten en algún momento sin que eso represente un peligro o indicio de que habrá un temblor de mayor magnitud.
Valdés afirmó que no hay evidencia de que vaya a ocurrir un sismo de gran magnitud en la capital, como los que han ocurrido en otros estados y que también afectan la CDMX.
"Vivimos en un país sísmicamente activo y aqui la respuesta sería estar prevenidos, preparados, pasan rápido los sismos pequeños, tienen efectos pequeños. He visto agrietamientos, algunas parecen viejas, sugiero revisar con cuidado las grietas, marcar con un lápiz, de donde a donde van y cuál es el grosor. Lo pueden revisar a los meses y ver si se ha extendido, eso da evidencia, si veo que se extiende quiere decir que la vivienda está respondiendo", apuntó.