La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó que los microsismos que sacudieron a la Ciudad de México el pasado 12 de diciembre tienen origen en lo que los especilistas llaman la reactivación de un enjambre sísimo, es decir, varios temblores que se presentan en lapsos cortos de tiempo.
Arturo Iglesias Mendoza, jefe del Servicio Sismológico Nacional (SSN), explicó que aunque tres de los movimientos del pasado martes fueron claramente perceptibles, la institución registró otros ocho que fueron imperceptibles, sumando un total de 11 eventos ese día.
De acuerdo con el especialista, los enjambres sísmicos no sólo son repetitivos, también suelen ser superficiales y con características similares. Aunque los más recientes son los de diciembre de 2023, el SSN también reportó eventos con una secuencia parecida en la década 80.
“No necesariamente hay un sismo grande y luego réplicas, sino que a veces ocurren temblores de tamaños equivalentes y del mismo origen, que probablemente correspondan a la misma falla”, explicó el especialista de la UNAM en un comunicado
Sismos en CDMX:Un registro complicado
Los microsismos del 12 de diciembre tuvieron una magnitud de 3, 2.8 y 2.4. Sin embargo, hasta ahora no hay evidencia de que estos enjambres se puedan presentar con intensidades mayores.
“Sabemos que la magnitud de un sismo está relacionada con el tamaño de la falla, pero el mapeo de las fallas en la Ciudad de México es complicado porque la urbe está encima", aseguró.
Pese a que los microsismos de Ciudad de México se sienten intensamente en algunas zonas de la capital, las ondas se atenúan con rapidez y provocan que en lugares como Iztapalapa sean casi imperceptibles.
La CDMX ha sido epicentro de cientos de sismos desde 1974, de acuerdo con el catálogo sísmico del SSN, pero el más fuerte tuvo lugar a inicios del milenio, el 15 de noviembre de 2003.
Este movimiento telúrico tuvo una magnitud de 4, su epicentro se registró a 5 kilómetros sureste de San Antonio Tecomitl, en la alcaldía Milpa Alta con una latitud de 19.18 y longitud de -98.97 grados.
De acuerdo con Iglesias Mendoza, el SSN registra unos 80 sismos por día en el país. Pese a que muchos pasan desapercibidos, hoy en día aún es imposible predecir el momento en que alguna parte de México se sacurdirá con un temblor.