Durante el primer día del operativo de verificación de microbuses y camiones de transporte público tras el alza de tarifa de 1 peso, el Gobierno de la Ciudad de México (CDMX) sancionó con inmovilización a 78 unidades, dos de ellas fueron llevadas al corralón, por incumplir con las medidas acordadas para permitir el alza de la tarifa.
De acuerdo con el secretario General de Gobierno, Martí Batres, los operativos de este jueves se realizarán con unidades en movimiento, a diferencia del primer día, que se realizaron en los Centros de Transferencia Modal (Cetram), o sea, los paraderos.
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"Lo que quiere la ciudadanía es un mejor servicio, seguridad. En el segundo primer día de operativo se revisaron más de mil unidades, 76 fueron suspendidas y 2 llevadas a corralón. También hubo cancelación de licencias de manejo", comentó en entrevista para En los Tiempos de la Radio con Óscar Mario Beteta en Grupo Fórmula.
El funcionario detalló que los operativos seguirán hasta el próximo 31 de julio y se informará a las rutas dónde se realizarán para evitar sorpresas.
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Además, recordó que las unidades tienen que llegar y salir obligatoriamente del Cetram, por lo que recordó que esta será una de las causas que puede derivar en una sanción para toda una ruta, que podrá cancelarse si se encuentran numerosas irregularidades en más de una unidad de esa ruta.
"Algunas unidades no llegaron y bajaron el pasaje antes, esto se va a hablar con las rutas; si las unidades permiten que se pase por alto los operativos, se va a sancionar a la ruta completa", advirtió.
Otro ejemplo de sanción es el retiro de la concesión, que se podrá realizar si se detecta que los choferes conduzcan en estado de ebriedad o intoxicados por cualquier otra sustancia.
De cualquier modo, recordó que la ciudadanía puede reportar cualquier anomalía en las unidades a través del Locatel (55-5658-1111), donde habilitó un espacio para recibir estas quejas, así como en las redes sociales de la Secretaría de Movilidad (Semovi).
Urge a la chatarrización de los microbuses del transporte público
Martí Batres también reiteró el llamado a los choferes de microbuses y autobuses de transporte público para que renueven sus unidades a través del programa de chatarrización, que les ofrece un bono de hasta 450 mil pesos para cambiar de vehículo.
"En ese sentido, en esta administración se han sustituido como 2 mil unidades y vamos a seguir usando esta renovación de las unidades. Faltan 5 mil unidades de ser renovadas", señaló en la entrevista.
Los choferes del transporte público se han opuesto a este proceso debido a su alto costo, pues si bien pueden obtener ese bono, el costo de una unidad nueva es de 1.8 millones de pesos; es decir, el bono en el mejor de los casos podría representar el 25 por ciento de la compra.
Además, alegaron que los conductores que han elegido esta opción se han enfrentado con deudas que no pueden pagar, sumado al poco ingreso que perciben por la falta de ajuste a la tarifa en relación con la inflación. Por ello, acusaron, incluso algunas rutas quebraron ante la baja de la demanda del transporte público durante la pandemia.