Esta mañana de lunes 2 de septiembre dos grupos colectivos de búsqueda de personas desaparecidas instalaron tendedero de fichas de búsqueda en la presidencia municipal de Tampico y en la plaza de Armas. Son 25 personas entre sus hijos, hijas, esposos o familiares que se encuentran desaparecidas desde hace 15 años algunos de ellos.
La Colectiva Buscando el Camino Hasta Encontrarlos de Aldama, Tamaulipas, María Maribel Medina Mendoza, detalló que el grupo de unas 15 personas son acompañadas por la Fiscalía Especializada de Personas Desaparecidas, la Guardia Nacional, quienes brindan la seguridad y acompañamiento; después de colocar las fichas en la plaza de Armas, dijo que se trasladarían hacia las ciudades de Ciudad Madero y Altamira.
Explicó que su hijo de nombre Aldo Oliver Guerra Medina, desapareció en el 2014 cuando de su trabajo, una tienda de conveniencia lo sacaron, un 20 de diciembre y no volví a saber de él.
Detalló que a la Fiscalía Especializada le ha faltado darle seguimiento para buscar a sus hijos, hijas y familiares, porque ellos han proporcionado información encontrada en diferentes municipios de Tamaulipas: en ranchos, predios baldíos, así como entre la maleza, encontrando información, artículos y hasta restos, pero no nos han dado resultados de todo lo entregado.
"Yo comencé a buscarlo y se fueron uniendo más padres de familia, seguimos en su búsqueda sin perder la fe en encontrarlo un día, tenía 29 años de edad mi hijo, ahora tiene casi 39. Nos acompañan 10 personas de mi colectivo, 5 de otro colectivo, somos muchos y todos queremos salir a buscar".
Por su parte, Claudia Salas Uribe por Amor a Nuestros Hijos y Familiares desaparecidos de Ciudad Victoria, Tamaulipas, detalló que su esposo desapareció en la capital del Estado un diciembre del 2008, salió a cargar gasolina y no regresó a su casa.
Unidas por un mismo dolor, piden apoyo a las autoridades
Pablo Damián Rivera Bonilla, tenía 26 años cuando desapareció en el municipio de Tampico. En el año de 2018, Pablo Damián, se dedica a la mecánica y es barbero, salió de su domicilio en la colonia Morelos a realizar un corte de cabello un 8 de septiembre, nunca más se supo de su paradero, explica su madre Jessenia Carrizalez González.
En la actualidad, en el 2024 está por cumplir 32 años de edad, asegura su madre desesperada, su hijo era derecho y trabajador, aunque interpuso una denuncia ante la Fiscalía General de Justicia por su desaparición, ha sido poco el apoyo recibido para seguir con la búsqueda; puesto que la señora Jessenia, asegura que por sus propios medios y recursos sigue buscándolo.
Añadió que en la Fiscalía tienen pruebas de ADN, información recabada por las mismas madres buscadoras pero no les brindan seguimiento.
"Todos conocemos a nuestros y sabemos cómo andan nuestros hijos, el mío andaba derecho, ya tiene 32, tenía 26 años de la colonia Morelos, colonia popular. Se perdió y no regresó a casa, desde ese entonces lo busco por mismos predios, nos dicen buscamos y no lo encontramos, tienen pruebas de ADN, no buscamos en ciudades grandes porque no tenemos los medios para buscarlos, pero seguimos como podemos", explicó.
Amparo Martínez y Felipe Santillán, nos comparten la pérdida de su hijo de nombre Missael Santillán quien se perdió en el 2019, cuando salió de su vivienda en el municipio de Ciudad Madero, se dirigía a cambiar unos muebles en la colonia Lucio Blanco y también estaría en la colonia Palafox pero no volvieron a saber Missael.
Explicó la señora Amparo que se han dirigido hacia Ciudad Victoria, a Matamoros, otros municipios fronterizos; han entregado información a las autoridades, datos que ellos mismos han recabado pero aún así, sienten que poco los han ayudado a encontrar a sus hijos.
"Salió de mi domicilio a cambiar unos muebles de ahí no supimos nada, iba a la colonia Lucio Blanco de ahí a la Palafox y no supimos nada, siguen las investigaciones siguen pero no hay avance, investigamos todo. Hemos entregado información a las autoridades, que nos apoyen, si están vivos o muertos aunque sea recuperar los cuerpos".
Todos Unidos por un mismo dolor se han dedicado por varios años a buscar a sus hijos, hijas y familiares desaparecidos, la mayoría de ellos con sus propios recursos recorren Tamaulipas y otros Estados cercanos a donde exista la posibilidad de encontrarlos, con la esperanza viva de que sea con vida. De no ser así, tener los cuerpos de sus hijos para que tengan una última morada.