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Tren Maya, Tren del Istmo, peso fuerte y Mexicana: ¿la oposición ya perdió en 2024?

A diferencia del oficialismo, la oposición carece de logros para presumir ante el electorado en los comicios del siguiente año.

Créditos: cuartoscuro
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Santa Claus llegó a la ciudad con muchos regalos para la Cuarta Transformación... y mucho carbón para la oposición.

A menos de seis meses de la elección presidencial, el oficialismo tiene mucho que presumir: en un diciembre 'dorado', el presidente Andrés Manuel López Obrador inauguró el Tren Maya, el Tren del Istmo y revivió oficialmente a Mexicana, con un vuelo del AIFA a Tulum. 

Es cierto, ambas obras aún están inconclusas, mientras que la nueva aerolínea del Estado mexicano apenas cuenta con cinco aviones. Sin embargo, en la percepción pública predomina la idea de que, a diferencia de otros sexenios, donde nos acostumbraron a bardas en vez de refinerías, por fin se logra construir grandes obras y grandes proyectos,

Ese sentimiento de que todo va bien en el país, salvo la seguridad, es reforzado por una economía estable que creció en 2023 más de lo que tenían previsto los economistas, sin contar que México avanzó al lugar 12 de las principales economías mundiales, dejando atrás a España y a Corea del Sur. Ergo, ya somos oficialmente la nación de habla hispana más rica del planeta.

La cereza en el pastel es el peso, que de manera inédita ha ganado terreno a pasos agigantados ante el dólar. Es la segunda moneda, tras el peso colombiano, que más ganancias ha obtenido frente al billete verde y tendrá su mejor año desde 1989, cuando todavía existía la Unión Soviética. 

En un país acostumbrado a las devaluaciones, depreciaciones, etcétera, tener una divisa que, por primera vez en mucho tiempo, le gana a su par estadounidense se siente como una victoria nacional.

Si dejamos de lado el tema de la violencia y la inseguridad, que son el gran pendiente de la 4T, un cáncer que azota al país desde hace varios lustros y lo seguirá haciendo por varias décadas más, la estabilidad del país significa un día de campo en el 2024.

La ciudadanía, finalmente, vota con el bolsillo y si la economía va bien, sin importar que sea por factores externos e internos, es probable que vote por la continuidad. Las encuestas son prueba de ello: Claudia Sheinbaum aventaja, en promedio, por más de 20 puntos en la carrera por la sucesión presidencial.

En tanto, la oposición vive un caos. Renuncias, pleitos internos y una mala reputación que no se puede sacudir.

No tiene nada que presumir esta Navidad, ni un proyecto que se contraponga al obradorismo, ni soluciones a los problemas de la nación... de los cuales ellos también son corresponsables.

Al contrario, de lo único que se pueden jactar este fin de año es que su militancia los anda abandonando para ponerse la casaca guinda.

En el frente PRI-PAN-PRD no hay nada por qué brindar. Habrá que recomendarles, en todo caso, colores de calzones para el próximo año.

Hoy la 4T puede presumir ante el electorado dos trenes, una nueva aerolínea, una nueva refinería, un nuevo aeropuerto y un peso estable. La oposición puede presumirle a la ciudadanía que aún no se les ha ido 'Alito'.