Morena no quiere los fideicomisos... a menos que sean los suyos.
Porque, como dice el dicho, es mejor ver la paja en el ojo ajeno, que la viga en el propio. O... es mejor darle periodicazos al perro del vecino, que al lobo del hogar.
El Instituto Nacional Electoral (INE) multó con 658.6 millones de pesos a los partidos políticos por diversas irregularidades en el manejo de sus finanzas... y sí, el partido guinda fue el más sancionado: le tocará pagar más de 300 millones de pesos en multas.
La principal irregularidad en la que incurrió Morena fue haber "jineteado" recursos de sus dirigencias estatales con la finalidad de constituir un fideicomiso destinado a la adquisición de inmuebles.
De acuerdo con las indagatorias de la Unidad Técnica de Fiscalización, el partido recibíó 372.6 millones de pesos de sus dirigencias estatales, lo cual impide acreditar el origen de ese dinero.
Este caso salpica directamente a la ex presidenta del partido, Yeidckol Polevnsky, quien fue acusada directamente por su sucesor, Alfonso Ramírez Cuéllar de haber hecho un manejo irregular de los recursos del partido.
Además de la multa, el INE obligó a la dirigencia nacional de Morena a que devuelva los recursos a sus dirigencias locales.
El consejero Ciro Murayama aprovechó este tema para darle un buen raspón a la Cuarta Transformación... que por un lado satanizó la figura de los fideicomisos y por otro lado les da un mal uso para recibir dinero estatal.
Por cierto, esta "maña" financiera de jinetear recursos estatales también la cometió el PAN.
Y del PRI y el PRD mejor no hablemos... pero a ambos partidos no les gusta pagar sus impuestos.
O bueno, sí hablemos de ello: mañana en este espacio.