Si hay algo que siempre vende en la industria de la música -y casi en todo lo que puede ser comercializable- es la nostalgia. Nadie ama más recordar esa infancia o adolescencia dorada en la que lo único que te preocupada era intercambiar tazos o conseguir tu vaso de los Looney Tunes favorito. Quizá por eso se ha convertido en toda una industria la creación de conciertos o giras "del ayer".
Los primeros que comenzaron con este tipo de formato en años recientes fueron Magneto y Mercurio, estas famosas "boy bands" apostaron por regresar a los escenarios para demostrar que casi en el quinto piso podían seguir bailando Vuela, vuela o Claridad con todo y los pasos peligrosos.
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Pero la realidad es que no siempre se obtiene lo que esperas; y es que como público ya no eres la misma persona de hace 20 o 30 años. Ya sabes diferenciar entre un playback y una muy mala interpretación; pero también ahora es posible leer a aquellos que antes eran "nuestros crush", quizá en el escenario se comportan como "inalcanzables" e incluso quizá "hacen desplantes" hacia las fans.
Dentro de estas giras de la nostalgia, siempre hay bueno y malo. Lo bueno en algunos casos es ver cómo algunas agrupaciones lograron pulir y mejorar su estilo; mientras que lo malo es que quedan a la luz viejas rencillas o problemas entre los integrantes. Justo como sucedió con OV7.
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Lo triste de las giras del reencuentro, la dura realidad...
Y no solo eso, mientras que la generación de chicas millennials clamaba por ver en el escenario de nueva cuenta a UFF -una boybad venezolana que cobró gran fama a principios de los 2000-, uno de sus integrantes, Fabio Melanitto, fue asesinado el en agosto de 2018 a sangre fría, despertando toda clase de especulaciones sobre sus actividades posteriores a ser parte del grupo.
"Él se encontraba afuera del domicilio donde fue violentado en compañía de una dama, llega un sujeto con un arma de fuego calibre .40 y le dispara hacia el rostro", explicó hace cuatro años el entonces titular de la Fiscalía de Homicidios de la capital, Roberto Aguas.
Los conciertos de reencuentro también sirven para que los artistas no pierdan o no se enfrenten a recintos con poca venta de boletos; sumar un nutrido cartel ayuda a que se asegure que los fans de las diversas agrupaciones puedan recibir al menos una parte importante de sus ganancias tras participar en eventos de este tipo.
Uno de los casos más recientes es el de 2000s Pop Tour, un proyecto de Bobo Producciones, liderada por Ari Borovoy en donde reunieron a algunos de los representantes de la época para ser parte de esta gira a la que muchos consideraron como "sosa" o "mal planeada".
Y es que mientras muchos clamaban como estelares a Belanova o a Reik, en su lugar llegó Pee Wee o Playa Limbo con una alineación que ni siquiera es la original. En redes sociales, muchos de los seguidores del programa se han detenido a decir la famosa frase de Barney Gómez en Los Simpson: "Ya déjalo, ya esta muerto", con respecto a estas giras que buscan revivir las viejas glorias del público y de los artistas.
Sin embargo, nada puede contra la nostalgia. Porque como decía el Divo de Juárez... "la costumbre es más fuerte que el amor".