El director del centro de derechos humanos Fray Marías, Enrique Vidal, denunció que los migrantes que viajaban en el camión de redilas contra el que dispararon militares sobre la carretera Villa Comaltitlán-Huixtla, en Chiapas, permanecen privados de su libertad en el Estación Migratoria Siglo XXI, un centro de detención en Tapachula. Entre los detenidos hay personas heridas, así como algunas víctimas ilesas.
Además, acusó en entrevista con Enrique Acevedo para Fórmula Noticias que personal humanitario se trasladó al hospital IMSS Bienestar de Huixtla, donde atienden a algunos de los migrantes heridos, para proveer ayuda, pero les prohibieron el acceso.
El defensor de derechos humanos indicó que hubo un uso excesivo de la fuerza, debido a que aunque sólo son dos los elementos del Ejército involucrados, asesinaron a seis migrantes e hirieron a 10. Aunado a que los uniformados no resultaron heridos pese a que argumentan que escucharon detonaciones en su contra.
"No es sólo haber repelido dos detonaciones previas por parte de la banda criminal que está a cargo del tráfico de personas, hablamos de uso excesivo de fuerza, de un mal entrenamiento del Ejército para llevar a cabo operativos migratorios, construidos desde una lógica de persecución", señaló.
Vidal agregó que los militares tenían conocimientos previos que les permitieron saber que había migrantes al interior del vehículo, debido a que sobre el tramo carretero siempre pasan camiones y vehículos que trasladan a personas en contexto de movilidad. A pesar de esto los uniformados activaron varias detonaciones y el uso de la fuerza no fue focalizado a los actores que supuestamente efectuaron los primeros disparos.
El defensor mencionó que a los migrantes no les permiten tomar medios de transporte ordinario en Chiapas, así que los orillan a ser víctimas de las redes de tráfico de personas y esto ocurre en colusión con personal del Instituto Nacional de Migración (INM), igual que con otras fuerzas de seguridad.
La Fiscalía General de la República (FGR) ya investiga el ataque de los militares contra el vehículo en el que viajaban los migrantes, de acuerdo con la presidenta Claudia Sheinbaum.
CJNG y Cártel de Sinaloa se disputan el tráfico de migrantes en Chiapas
Eduardo Guerrero, director de Latia Intelligence, señaló en entrevista para el mismo espacio informativo que Chiapas es el segundo estado del país donde el crimen organizado está ganando poder y controlando la mayor parte del territorio. Lo que se desencadenó desde hace cuatro años, cuando el gobierno federal anterior envió a más de 30 mil elementos de la Guardia Nacional a cuidar la frontera de Chiapas con Guatemala para frenar los flujos migratorios.
El especialista detalló que esto provocó que el mercado de tráfico y trata de personas se ampliara y fuera atendido como un "negocio" por los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa.
Fue así como estas organizaciones delictivas empezaron a ofrecer servicios a los migrantes para traficarlos por la frontera sur y llevarlos hasta los límites con Estados Unidos. Esto, a su vez, provocó enfrentamientos entre ambos cárteles y el surgimiento de nuevas células delictivas, como el Cártel Nuevo Guatemala-Chiapas.