Este lunes 24 de julio altos funcionarios del gobierno de mexicano se reunieron con representantes del gobierno estadounidense en Palacio Nacional para tratar los tres temas que han causado más movimiento recientemente en cuanto a la relación bilateral: tráfico de drogas, armas y migración.
Del lado mexicano estuvieron presentes el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y los más altos miembros de su gabinete, como la secretaria de Seguridad federal Rosa Icela Rodríguez, la canciller Alicia Bárcena, la secretaria de Gobernación Luisa María Alcalde, el secretario de la Defensa Luis Cresencio Sandoval, el titular de Marina Rafael Ojeda Durán, el fiscal federal Alejandro Gertz Manero y otros miembros de la diplomacia.
Mientras que del lado estadounidense estuvieron presentes la asesora de Seguridad Nacional Elizabeth Sherwood-Randall, la fiscal general adjunta Lisa O. Monaco, la subsecretaria interina de Seguridad Nacional Kristie Canegallo y el subsecretario de Estado de Administración y Recursos Rich Verma.
Esta es la cuarta visita que Elizabeth Sherwood hace a Palacio Nacional; en estas reuniones ha destacado la disparidad de las autoridades que asisten a discutir los mismos temas a México.
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En primer lugar, la Casa Blanca destacó su intención de que se combatan las acciones que permiten el traspaso de drogas, especialmente el fentanilo, como interrumpir el suministro de los productos químicos utilizados, prevenir su tráfico a través de la frontera y atender los servicios de salud pública para reducir la demanda y aumentar el tratamiento.
En segundo lugar, reiteró su compromiso para evitar el trasiego de armas a México. En tercer lugar, se reiteró el compromiso para atender la migración siguiendo los principios de la Declaración de Los Ángeles sobre Migración y Protección.
Además de que "Estados Unidos y México se comprometieron a ampliar aún más la disponibilidad de vías legales en toda la región, incluidos México y Estados Unidos. Los líderes también discutieron la expansión de nuestro trabajo de desarrollo conjunto en América Central y el mantenimiento de fuertes consecuencias por la entrada irregular en nuestra frontera compartida", según detalló la Casa Blanca en un comunicado.
Por su parte, el presidente AMLO informó sobre la reunión en un tuit y enfatizó en la importancia al respeto de los derechos humanos de los migrantes; mencionando en segundo y tercer lugar el combate al tráfico de fentanilo y de armas.
Esto se da en medio de sanciones en contra de empresas relacionadas con el tráfico de fentanilo por parte del Departamento del Tesoro estadounidense, además del establecimiento como prioridad para la DEA la captura de varios narcotraficantes mexicanos, como los cercanos a los Chapitos y su enfoque para capturarlos.
Por otro lado, este martes el presidente López Obrador agradeció al gobierno de Biden la demanda que entabló en contra del gobernador de Texas, Greg Abbott, por la colocación de boyas y alambre de púas en la frontera con México.