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El dilema del fentanilo: ¿Cómo ayuda a los enfermos y por qué no se puede sustituir como analgésico?

No es viable dejar de utilizar el fentanilo con fines médicos, ya que no existe algún fármaco o analgésico que pueda sustituirlo y tampoco es una estrategia útil para combatir el tráfico ilegal, asegura especialista.

El presidente Andrés Manuel López Obrador indicó que el fentanilo se dejará de usar con fines médicos en México.Créditos: Rocío Martínez/ Grupo Fórmula.
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El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) anunció la semana pasada que buscará prohibir el uso del fentanilo con fines médicos en México. Para ello solicitó a personal médico y científico analizar la posibilidad de sustituirlo con otros analgésicos y en caso de que resulte viable, aseguró que solicitará a Estados Unidos que realice la misma suspensión.

El fentanilo ha provocado una crisis de salud pública en EU, donde han perdido la vida alrededor de 100 mil personas a causa del consumo en exceso del opioide, de acuerdo con el Instituto para la Economía y la Paz (IEP). Además, el 97 por ciento se ingresa por la frontera que dicho país tiene con México.

Por ese motivo el gobierno federal tiene que buscar una estrategia para frenar a los cárteles mexicanos que la ingresan de forma ilegal.

El anunció de AMLO generó una discusión en redes sociales entre especialistas y varios advirtieron que la transición será difícil, sino es que hasta imposible.

Al respecto, el doctor Einar Mújica, especialista en anestesiología y algología, detalló en entrevista que el fentanilo es un medicamento que tiene un perfil farmacológico único, por lo que no es posible sustituirlo o reemplazarlo con otro fármaco.

“¿A qué me refiero con esto? Cuando tú tomas, por ejemplo, algo para el dolor no es lo mismo tomar una aspirina que un naproxeno, que un ibuprofeno, que un paracetamol. Aunque todos pertenecen al mismo grupo farmacológico cada fármaco tiene propiedades únicas y distintas que hacen que nosotros elijamos utilizar uno por encima de otro dependiendo de la situación de cada paciente”, explicó a Grupo Fórmula.

Por ello, el fentanilo no puede ser sustituido por otros medicamentos, ya que por su perfil farmacológico los especialistas médicos lo utilizan en distintas áreas aparte de la anestesiología. 

¿Para qué se utiliza el fentanilo y por qué no puede ser sustituido?

La algología, especialidad que se encarga del estudio y tratamiento del dolor, es otra área que recurre al fentanilo, sobre todo cuando una persona que tiene algún padecimiento ha recurrido a distintos tratamientos y ninguno le ha funcionado.

Así que el fentanilo de uso médico se utiliza para tratar el dolor intenso. También sirve para mantener con vida a las personas que se encuentran en terapia intensiva; así como en pediatría, en el área de urgencias y para los pacientes que se encuentran en otras áreas de hospitalización.

“Entonces no solamente se usa para anestesiología, prohibirlo implicaría dejar a millones de personas sin el tratamiento adecuado para ellas y es terrible porque, insisto, no hay sustituto del fentanilo”, explicó.

El especialista destacó que si el uso del fentanilo se prohíbe, los médicos se van a ver obligados a buscar otras opciones; sin embargo, eso no quiere decir que el opioide tenga sustituto ni que es la mejor alternativa, pero no pueden dejar a los pacientes sin tratamientos.

Al respecto, Einar Mújica agregó que cuando un fármaco tiene sustitutos es porque hay otras opciones para tener el mismo resultado y en este caso no existe.

“Acá no hay una alternativa que nos dé el mismo resultado y ese es el gran problema, nos vamos a ver forzados a utilizar otros fármacos, pero sin obtener el mismo resultado. Eso crea una problemática, no solamente para nosotros, sino para el paciente que es el principal afectado”, añadió.

Prohibir el uso de fentanilo médico no va a acabar con el tráfico ilegal

El uso de opioides con fines médicos siempre ha sido satanizado, de acuerdo con Einar Mújica. Esto se debe a que este grupo de fármacos generan desconfianza porque pueden generar adicción o dependencia. No obstante, en la medicina el uso de opioides ha sido muy útil, pero hay pocas alternativas.

“Desafortunadamente esta satanización, además injusta, para los opioides ha ocasionado que en México siempre haya un desabasto. Aquí nosotros en el ámbito de la algología decimos la opiofobia, que aquí en México hay un hay una opiofobia que nos ha impedido el tratar adecuadamente a los pacientes durante décadas”, comentó.

La falta de medicamentos hechos a base de opioides provoca que los médicos no cuenten con alternativas para sustituir el uso de fentanilo. Por lo que en caso de que su utilización se prohíba también se verán limitados.

Einar Mújica señaló que prohibir el uso con fines médicos no va a resolver el consumo y comercio ilegal de este opioide. Esto se debe a que el fentanilo ilegal no tiene el mismo origen que el que se comercia de forma ilegal.

“El problema real no es el mercado legal del fentanilo, ni las presentaciones médicas del uso legal del fentanilo. El problema está en lo ilegal, en el que se produce, se comercia, se importa y se mueve de manera ilegal no el de los laboratorios”, enfatizó.

El fentanilo que se utiliza con fines médicos es recetado en inyecciones, parches o pastillas y es de venta controlada, por lo que es obligatorio que sea recetado por un especialista. Mientras que el opioide ilícito se comercializa en forma de polvo, pastillas, en forma líquida y los cárteles suelen mezclarlo con otras drogas sintéticas para incrementar sus efectos.

No tiene sentido volver a los analgésicos que se usaban antes del fentanilo

López Obrador sostuvo que antes del uso del fentanilo se utilizaban otros analgésicos, por ese motivo sugirió revisar la posibilidad de sustituirlo. En este sentido, el doctor Einar Mújica dijo que sí se utilizaban otros fármacos porque aún no se podría recurrir a este opioide, pero volver a utilizarlos no es ni lo ideal ni lo deseado.

“Es como prohibir la televisión porque antes teníamos radio. Bueno, ahí no tiene sentido, no puedes volver a las opciones previas porque para empezar son escasas también, o sea, ni siquiera insisto, no es ni siquiera como que tengamos el gran arsenal para sustituirlo”, agregó.

Las alternativas del fentanilo son escasas, son opioides y pueden tener los mismos efectos secundarios en cuanto adicciones. Por lo que prohibirlo no tendría “ni pies, ni causa”, según el especialista.

El desabasto de medicamentos y la falta de fentanilo va a agravar la crisis de salud

México enfrenta un desabasto de medicamentos y sumado a la prohibición del uso del fentanilo con fines médicos podría agravar el estado de salud de algunos pacientes. Sobre todo de aquellos que tienen padecimientos que les generan mucho dolor.

Esto se debe a que no hay una alternativa para sustituir el opioide y los fármacos que podrían subsanar la necesidad de uso no son de fácil acceso ni tienen el mismo efecto. Por lo que es posible que se agraven algunos padecimientos.

Einar Mújica dijo que si un paciente oncológico requiere de parches transdérmicos con fentanilo para reducir su dolor, con la prohibición ya no podrá acceder a estos y tampoco tendrá una alternativa que tenga los mismos efectos.

“Las alternativas que tenemos son con un perfil farmacológico diferente que no van a cubrir el dolor, la aparición del dolor condiciona que la enfermedad pueda progresar más rápido porque es un condicionante y va a afectar también a otras áreas de su tratamiento y si ya tenemos escasez, también de quimioterapias y de otros este medicamentos, pues la situación global de esos pacientes va a empeorar”, destacó.

El presidente Andrés Manuel López Obrador informó que dará una conferencia para abordar el tema e informar si es viable suspender el uso de fentanilo con fines médicos.