Los propios hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, “Los Chapitos”, dieron la orden de “matar o entregar" a Nestor Isidro Pérez Salas, alias “El Nini”, cuya figura como uno de sus jefes de seguridad había crecido mucho en los últimos meses, informó la periodista Anabel Hernández.
En entrevista con Óscar Mario Beteta, la comunicadora especializada en temas de narcotráfico dio a conocer que el propio Iván Archivaldo Guzmán Salazar dio esta orden para evitar verse opacado por una figura creciente como la de “El Nini”.
“El hermano mayor de los Guzmán e hijo mayor de ‘Chapo’ Guzmán, el líder de ‘Los Chapitos’, dio una orden ahí a su grupo criminal que era de matar o entregar al ‘Nini’ porque se había convertido (en una figura fuerte) justamente por todas estas masacres, justamente por este dinero que le daba el tráfico de fentanilo y justamente pues la fama que genera fascinación en algunos grupos sociales de Culiacán”, explicó
Además señaló que el “Nini” tenía varios amigos famosos como Peso Pluma, el cantante de regional mexicano que recientemente fue nominado al Grammy y ha obtenido diversos premios por su carrera. “Es uno de los mejores amigos del 'Nini' y de hecho es al 'Nini' a quien este sujeto le canta la canción de ‘El Belicón’”, explicó.
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Los errores del “Nini”
Por otro lado, el especialista Oscar Baldera detalló que el “Nini” cometió varios errores en los últimos meses que orillaron su captura, entre ellos, posibles roces con los hermanos Guzmán en la cabeza de la organización.
“En los últimos meses había adquirido cierto poder que le dio la sensación de que podía empezar hacer negocios aparte, ayer se empezó a hablar de que podría haber sido entregado por los propios 'Chapitos' para castigar esa libertad”, explicó en el programa “En los tiempos de la radio”.
Agregó que el propio Pérez Salas estableció anillos de protección de sus sicarios al sentirse perseguido dentro de su propia organización y que, en esa persecución, intentó secuestrar a dos profesores en Colina San Miguel ante un mal presentimiento.
“También comete un grave error, me parece, en los últimos días (...) el 24 de octubre él ordena a través de uno de sus jefes de plaza, que le dicen ‘El Chango’, que secuestre a seis personas de una casa en Culiacán”, señaló. “Entre esas personas había una mujer de origen estadounidense y un adolescente de 13 años”.
En este sentido, puntualizó que tanto las fallas como la forma en la que fue emboscado durante su detención expone dos posibilidades: un descuido fatal o la orden de alguien superior para deshacerse de él.
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