Este fin de semana se suspendieron en Tijuana tres fiestas clandestinas que acumulaban más de 300 jóvenes menores de 18 años asistentes y que consumían bebidas alcohólicas, informó el Ayuntamiento de esta entidad en Baja California.
Las fiestas se localizaron en la colonia Pedregal de Santa Julia, la colonia Reforma y la colonia Mariano Matamoros Norte, de la ciudad bajacaliforniana.
En el domicilio particular de la colonia Pedregal de Santa Julia, había alrededor de 200 menores de 18 años, por lo que después del desalojo se llamó a sus madres, padres y tutores para que asistieran por ellas y ellos.
La segunda fiesta clandestina se llevaba a cabo en una casa habitación y patio de la colonia Reforma, en donde había alrededor de 100 menores de edad también consumiendo alcohol; en este caso inspectores del XXIV Ayuntamiento suspendieron el evento.
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Finalmente, en la colonia Mariano Matamoros Norte, los organizadores estaban haciendo uso de la vía pública para celebrar una fiesta familiar con toro mecánico, carpas y sonido; en el lugar se encontraban alrededor de 90 asistentes entre los cuales había menores de 18 años, por lo que se suspendió el evento y se liberó la vía pública, señaló el Ayuntamiento de Tijuana en un comunicado.
El director de Inspección y Verificación Municipal, Adolfo García Dworak, indicó que en los tres casos, la intervención se logró gracias a la denuncia ciudadana, al igual que la labor del departamento de Inspectores Cibernéticos, que detectan convocatorias en redes sociales a eventos que ponen en riesgo la salud de jóvenes.
De acuerdo con la corresponsal de Grupo Fórmula en Tijuana, Rocío Galván, los jóvenes tenían desde 13 hasta 17 años y las y los muchachos no solamente estaban consumiendo alcohol, sino que también estaban haciendo uso de estupefacientes.
La reportera señaló que la alcaldesa de Tijuana, Montserrat Caballero Ramírez, ha reconocido la proliferación de este tipo de eventos.
En agosto de 2022, también se llevó a cabo la clausura de otra fiesta clandestina con alrededor de 200 jóvenes entre 16 y 20 años de edad, en la colonia Tomás Aquino, también debido a la información proporcionada por inspectores cibernéticos.
*Con información de Rocío Galván