Las primeras redes de acompañantes de aborto surgieron durante la primera década del siglo XXI, varias estaban conformadas por activistas que estaban involucradas en otras luchas, principalmente feministas.
Además, surgieron en países donde había legislaciones restrictivas, principalmente en América Latina, donde no había acceso a bortos seguros en contextos clínicos, de acuerdo con el informe Realidades y Retos del aborto con tos en México de Ipas México.
De acuerdo con el informe hay tres tipos de acompañantes: colectivas, organizaciones no gubernamentales y autónomas. Las primeras están integradas por activistas feministas; las segundas se conforman por voluntarias que se dedican a promover los derechos sexuales y reproductivos; las terceras no pertenecen a ninguna colectiva u organización, suelen acompañar por iniciativa propia aunque sí se mantienen en contacto con colectivas y ONG.
El 74.4 por ciento de las personas acompañantes y proveedoras de aborto son mujeres; mientras que el 21.5 por ciento son hombres, según datos de la encuesta realizada por Safe2choose en colaboración con Ipas México.
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Asimismo, el 22.2 por ciento indicó que eran médicas y médicos generales; el 20 por ciento ginecólogas y obstetras, y el 7.8 por ciento dijo no ser profesional de la salud.
La mitad de las acompañantes encuestadas se formaron como acompañantes en organizaciones no gubernamentales. El 80 por ciento de las personas acompañan abortos que se realizan con medicamentos y 50 por ciento proveen abortos realizados con aspiración, reveló la encuesta.
¿Qué se necesita para ser acompañante de aborto?
Daniela Téllez, integrante de Di RAMONA, organización de Hidalgo, detalló en entrevista con Grupo Fórmula que para ser acompañante es necesario querer ayudar a las mujeres y personas con capacidad de gestar que quieren ejercer su derecho al aborto, así como tener la apertura para capacitarse de forma permanente. Asimismo, es necesario trabajar de forma continua en el estigma que pudiera existir entorno al aborto.
“Creo que es eso: el compromiso, las ganas, la apertura para la formación, el trabajo del estigma y pues un montón de escucha y dos montones de empatía. Eso es a nivel general”, expresó la integrante de DiRAMONA.
Al respecto, Luz María Reyes, acompañante de Orizaba, Veracruz, e integrante de Marea Verde Altas Montañas, comentó a Grupo Fórmula que las creencias personales no deben interferir en los procesos de acompañamiento.
La acompañante consideró que la capacitación también se tiene que realizar desde la empatía y sororidad hacia las mujeres y personas gestantes.
¿En dónde puedo recibir capacitación para ser acompañante de aborto?
Las colectivas y organizaciones capacitan a otras personas mediante talleres o como ellas les llaman “escuelitas aborteras” para que se conviertan en acompañantes. Algunas también realizan pláticas informativas sobre el aborto con el objetivo de que las mujeres y personas gestantes resuelvan sus dudas sobre el tema y cuenten con la información necesaria para ejercer su derecho si en algún momento lo desean.
En el caso de DiRAMONA, una vez al año abren una escuelita abortera para formar acompañantes en procesos de aborto autogestivo con medicamentos. Tiene una duración de 12 semanas y durante ese tiempo abordan diferentes temas, como el estigma, la parte médica, legal, psicológica y también un poco de medicina tradicional mexicana para acompañar los procedimientos de interrupción del embarazo sin “extramedicalizarlos” y recurrir a esta para tratar síntomas secundarios.
“Que a lo mejor podamos apoyar estos otros síntomas secundarios como los coliquitos, las náuseas, con algún otro tecito o infusión o una alimentación específica para ir recobrando energías posteriores al procedimiento”, detalló Daniela Téllez.
Asimismo, trabajan métodos de autocuidado, seguridad holística y cada año realizan actualizaciones de diversos temas. La integrante de DiRAMONA detalló que al final las personas que se formaron como acompañantes realizan simulaciones de acompañamiento para practicar y que les ayuden a mejorar su forma de responder ante ciertas situaciones o preguntas.
De esa forma garantizan que el acompañamiento será integral para cualquier persona que se acerque. La escuelita abortera de 2022 finalizó hace dos meses aproximadamente y esperan que en marzo o abril de 2023 empiece la siguiente. El cupo es limitado y quienes se inscriben tienen que acudir a las capacitaciones de forma presencial. Como ellas, otras acompañantes organizan escuelitas aborteras para formar acompañantes.
Esta información forma parte de la investigación especial Sobrevivir juntas a la violencia contra las mujeres realizado en el marco del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres (#25N).