Las autoridades de Estados Unidos informaron sobre la recuperación de 37 monedas de oro, equivalentes a un millón de dólares, que habían sido robadas por una persona contratada para extraerlas de una flota de galeones españoles hundidos cerca de las costas de Florida.
De acuerdo con la Comisión para la Conservación de la Fauna y la Flora (FWC, en inglés), las 37 piezas formaban parte de un lote de 101 monedas de oro que habían sido descubiertas en 2015 por miembros de la familia Schmitt, quienes habían sido contratados para esas labores por la firma 1715 Fleet-Queens Jewels.
"Si bien 51 de estas monedas fueron reportadas correctamente y adjudicadas, 50 monedas no fueron reveladas y posteriormente fueron robadas", explicó en un comunicado FWC.
Esta agencia estatal se lanzó junto con el FBI a una larga investigación tras descubrir en junio de este año evidencia que vinculaba a Eric Schmitt con la venta ilegal de varias de esas monedas de oro descubiertas frente a la llamada Costa del Tesoro de Florida, en el este del estado.
Robo de monedas de oro
Los investigadores ejecutaron varias órdenes de registro y recuperaron monedas que habían sido robadas entre 2023 y 2024 de residencias privadas, cajas de seguridad y subastas.
Las autoridades identificaron a Eric Schmitt como principal sospechoso tras el empleo de "ciencia forense y datos de geolocalización" que permitieron descubrir que una fotografía de las monedas robadas había sido tomada en el condominio del detenido, ubicado en la floridana Fort Pierce.
"También se descubrió que Eric Schmitt tomó tres de las monedas de oro robadas y las colocó en el fondo del océano en 2016 para que las encontraran los nuevos inversores de 1715 Fleet - Queens Jewels", añadió la FWC.
Esta agencia estatal recurrió a expertos e historiadores para autentificar las piezas, las cuales posteriormente fueron entregadas a sus custodios legales, y expresó su compromiso de recuperar las restantes trece monedas robadas y de "llevar ante la justicia a los involucrados en su venta ilegal".
Eric Schmitt afronta cargos por tráfico de propiedad robada, de acuerdo a la FWC.
Las monedas robadas formaban parte una flota de 11 galeones españoles que había zarpado de La Habana (Cuba) con destino a España cargada de riquezas del nuevo mundo y fue sorprendida por un huracán frente a la costa de Florida en julio de 1715.
Se estima que en el naufragio de los galeones murieron al menos 1.000 marineros.