Los senadores republicanos John Kennedy y Lindsey Graham presentaron una iniciativa ante el Congreso de los Estados Unidos, con la finalidad de que al menos nueve cárteles mexicanos sean catalogados como organizaciones terroristas, entre los que se hallan el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Sinaloa y el Cártel del Noreste (CDN).
De acuerdo con la iniciativa, presentada este miércoles, la seguridad de los estadounidenses están "bajo ataque" a causa de las actividades ilícitas de las organizaciones delictivas. Lo anterior a causa de que trafican fentanilo, un opioide que fue catalogado como 50 veces más poderoso que la heroína.
Ambos republicanos argumentan que los cárteles mexicanos cumplen con las características de las organizaciones terroristas, pues cometen asesinatos, secuestros, aparte de que usan explosivos y armas de fuego. Recordaron el caso de los dos habitantes de Carolina del Sur que fueron asesinados en Matamoros.
Otros delitos que le achacan a las organizaciones delictivas de México son tráfico de personas, tráfico sexual infantil, allanamiento de morada, robo de auto, entre otros. Acusan que los cárteles no sólo "devastan" poblaciones en México, sino también en los Estados Unidos (al traficar fentanilo) y representan una amenaza para todo el planeta.
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Las organizaciones delictivas en la mira son las siguientes: Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), el Cártel de Sinaloa, Cártel del Noreste (CDN). el Cártel del Golfo, Los Zetas, el Cártel de Juárez, el Cártel de Tijuana, el Cártel de los Beltrán-Leyva y la Familia Michoacana (incluyendo a los Caballeros Templarios).
Entre las medidas que plantean en su iniciativa, John Kennedy y Lindsey Graham pretenden la creación de un organismo interinstitucional para hacer frente a los cárteles mexicanos, en el caso de que sean designados como organizaciones terroristas, "los estadounidenses están siendo asesinados a ambos lados de la frontera", expresó Kennedy.
No es la primera vez que los republicanos presentan una iniciativa en contra de los cárteles mexicanos, tal fue el caso de Dan Crenshaw y Michael Waltz, quienes propusieron que las fuerzas armadas de los Estados Unidos sean usadas para combatir al crimen organizado en México, similar a lo que ocurrió con el Plan Colombia en los años 90.
El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) cuestionó a Lindsey Graham, uno de los senadores que presenta esta iniciativa, acerca de si hay capos en los Estados Unidos y quiénes se dedican a distribuir sustancias ilícitas como el fentanilo, que ha dejado al menos 100 mil fallecidos en los Estados Unidos.