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El truco que pocos conocen para que el jamón dure por más tiempo en el 'refri'

Almacenar el jamón de forma incorrecta puede aumentar el riesgo de contaminación bacteriana y enfermedades transmitidas por los alimentos.

El jamón es un alimento delicado.Créditos: Flickr
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¿El jamón que guardas en el refrigerador se echa a perder o se vuelve 'baboso' en poco tiempo? No sufras más y tampoco exprimas tu bolsillo comprando nuevamente este producto, aquí te contaremos sobre un sencillo truco que permitirá que tu jamón dure varios días. 

El jamón es uno de los alimentos más delicados, el cual puede perder su frescura rápidamente si no es almacenado de manera correcta.

Por ello en redes sociales circulan varios trucos que te permitirán cuidar tu jamón para que este dure por más tiempo y puedas sacarle provecho al máximo en diversas recetas.

Así puedes evitar que tu jamón se eche a perder rápido

Almacenar el jamón adecuadamente ayuda a prevenir el crecimiento de bacterias y la contaminación cruzada, pues puede secarse, volverse rancio y desarrollar moho.

Aquí te dejamos un par de formas de guardar el jamón que te permitirán prolongar su vida útil y evitarás desperdiciarlo.  

Para la primera técnica solo debes hacer lo siguiente:

  1. Divide el jamón
  2. Envuélvelo en pequeños bloques con plástico
  3. Guarda una parte en el congelador y otra en el refrigerador

O bien, esta es otra técnica útil y famosa en redes sociales:

  1.  En dos envases de vidrio con tapa coloca papel encerado
  2. Coloca el jamón en el recipiente
  3. Cubre con el papel y pon la tapa
  4. Guarda en la nevera

Y ¡listo! Cualquiera que sea el proceso que decidas usar, lograrás retrasar el proceso de descomposición del jamón, con lo que alargarás su vida y disfrutarás de platillos deliciosos. 

¿Cómo saber si el jamón ya no sirve?

De acuerdo con el blog Jamónypaletilla, este producto da muchas señales cuando ya está echado a perder, solo tienes que ser muy observador u observadora para detectar lo siguiente:

  • Olor desagradable: Si el jamón desprende un olor agrio, rancio o putrefacto en lugar de tener un aroma fresco y característico, es probable que esté en mal estado.
  • Cambios en el color: Si el jamón presenta un tono grisáceo o verdoso, es una señal de que no es seguro comerlo.
  • Exceso de grasa: "Cuando se produce el exceso de grasa puede denotar lipólisis produce en la congelación del jamón o dar una sensación de aceitosidad cuando te la comes".

Recuerda que determinar si el jamón ya no es apto para su consumo es crucial para evitar enfermedades alimentarias para ti o el resto de tu familia.