Antes de ser el refresco más popular de México y el mundo, la Coca-Cola nació fue un jarabe, que creó el doctor John Stith Pemberton, farmacéutico de Atlanta, Georgia, en mayo de 1886.
Pemberton desarrolló el producto como la intención de que sirviera para combatir problemas digestivos y sirviera para aportar energía.
Cuando el farmacéutico produjo dicho jarbe, en una jarra, lo llevó a la "Jacob's Pharmacy", donde fue probado y "pronunciado como 'excelente'".
Después el jarabe se mezcló con agua carbonatada, "para producir una bebida que de inmediato fue 'deliciosa y refrescante'", presume el portal de Coca-Cola.
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El producto comenzó a venderse por cinco centavos el vaso, como una bebida de la fuente de sodas del "Jacob's Pharmacy", la cual tardó en tener éxito.
En el primer año, las ventas promedio de la Coca-Cola fueron de nueve botellas por día; es decir, se vendieron cerca de 3 mil 285 envases.
En ese entonces, las botellas de Coca-Cola no eran nada parecidas a las de hoy, ya que éstas eran obscuras y tenían una asa, que no hacía muy apetecible el producto (hay que ser sinceros).
¿Quién inventó el nombre de Coca-Cola?
De acuerdo con el sitio web de Coca-Cola, el hombre que inventó el nombre de la marca fue Frank M. Robinson, socio y contador de John Stith Pemberton.
"Creyendo que las dos 'C' se verían bien en la publicidad, el socio y contador del dr. Pemberton, Frank M. Robinson, sugirió el nombre y escribió la ahora famosa marca comercial Coca-Cola con su caligrafía única", señala el portal.
El primer anuncio en el periódico para Coca-Cola apareció en The Atlanta Journal, que invitaba a la gente a probar “la nueva y popular bebida de fuente de sodas”.
Letreros de hule pintados a mano que decían "Coca-Cola" se podían ver en los toldos de las tiendas, aunados a la sugerencia “beber”, que informaba a los transeúntes que la nueva bebida era un refresco de la fuente de sodas.
Conforme fue creciendo Coca-Cola, Pemberton vendió porciones de su negocio a varios socios y, justo antes de su muerte en 1888, vendió su interés restante a Asa G. Candler; después, "el sr. Candler, oriundo de Atlanta con gran sentido empresarial, procedió a comprar los derechos adicionales y adquirir control total".
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