En un total de 370 pruebas, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) evaluó hasta 25 marcas de yogurt griego, incluyendo las más famosas y algunas que no son tan conocidas, o fueron elaborados en algún otro país, como es el caso del producto hecho en los Estados Unidos y que los niños no deben de consumir; te decimos por qué.
Aparte de la información comercial que ofrecen, la dependencia determinó que todos los productos cumplieran con el respectivo contenido neto que dicen en sus empaques; el aporte de proteínas, grasas, carbohidratos, contenido energético, además de que se constató que la grasa proviniera de la leche; también se identificó aquellos productos que contenían almidón.
¿Cuál es el yogurt griego elaborado en EU y que no deben consumir los niños?
En el rubro de yogurt saborizado y sin azúcares añadidos, el producto Chobani Zero Sugar fue considerado como no recomendable para las niñas y niños, debido a que contiene edulcorantes. El costo promedio de este artículo es de 33 pesos, en su presentación de 150 gramos, de acuerdo con la Profeco.
La dependencia recalca que este yogurt contiene estevia y fruta del monje -un endulzante de origen natural y que se usa en la repostería-. Uno de sus puntos a favor es que "adiciona otras bacterias benéficas, además de las que establece la norma" y sus grasas provienen de la leche.
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En cuanto a la información nutrimental: el yogurt cuenta con un 7.6 por ciento de proteína, 0 por ciento de azúcares e igual porcentaje de grasas, tan sólo uno por ciento de acidez, 3.3 por ciento de carbohidratos disponibles y 46 kilocalorías por cada 100 gramos como contenido energético, conforme a la evaluación hecha por la dependencia.
¿Por qué las niñas y los niños no deben consumir edulcorantes?
En los supermercados mexicanos, las personas pueden encontrar varios productos con la leyenda "contiene edulcorantes, no recomendable en niños", ¿pero qué les ocasiona? Para empezar, la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconseja el uso de estos productos a todas las personas, ya que pueden causar efectos a largo plazo: "un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos", afirma.
Las niñas y los niños tampoco deben consumir edulcorantes, ya que no son nutritivos, aparte de que cambian los gustos y las preferencias alimenticias, de acuerdo con estudios citados por la Academia Americana de Pediatras. Estos ingredientes también modifican la microbioma intestinal de los infantes, lo que les puede conducir a padecer de síndrome metabólico, resistencia a la insulina y diabetes.
Todas aquellas niñas y niños que cuentan con una enfermedad llamada fenilcetonuria -que no pueden procesar la fenilalanina- no deben consumir aspartamo, un edulcorante que se encuentra en algunos productos ultraprocesados. Pero uno de los mayores motivos es que los edulcorantes no aportan ningún valor nutricional.