Los frijoles directos de la olla, o refritos con un poco de manteca son uno de los manjares más ricos de los acompañamientos en los platillos mexicanos. A pesar de su delicioso sabor en cada uno de los tipos de las semillas, existe algo en lo que todos concordamos es incómodo después de comerlo: los gases.
¿Por qué comer frijol produce gases?
Expertos aseguran que los frijoles provocan gases (flatulencias, o “pedos”) debido a que contienen oligosacáridos, un polímero de sacárido que contiene una pequeña cantidad de monosacáridos.
En resumen, el cuerpo humano no está preparado para digerir este carbohidrato y, como consecuencia, pasan por el intestino delgado sin ser procesados y terminan por producir gases como el CO2 (Dióxido de carbono).
¿Cómo evitar los gases sin dejar de comer frijoles?
Todo no está perdido para los amantes de los frijoles, ya que existen varios métodos para intentar evitar que los gases se apoderen de la merienda puedes intentar uno o varios de los siguientes métodos para “reducir los gases” al momento de comer frijoles:
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- Remojarlos
Antes de ponerlos a cocer puedes dejarlos en agua una noche anterior por, al menos, 6 u 8 horas. Evita a toda cosa agregar bicarbonato, ya que puede dañar los nutrientes, así como su sabor y textura.
- Cocinar a fuego lento
Otra alternativa que podría ayudar a reducir los gases al comer frijoles, es cocinarlos a fuego lento en la estufa, ya que la cocción suave de la leguminosa provoca menos gases.
- Quita la espuma
Antes de dar el primer bocado, intenta quitar la espuma que se genera en la capa superior de los frijoles. Si es posible, intenta quitar esta capa superficial al momento de la cocción en varias ocasiones.
A pesar de la variedad de métodos caseros que las personas recomiendan, lo cierto es que la manera más sencilla de evitar poco a poco los gases después de comer frijoles es consumirlos de manera recurrente, aunque sea en pequeñas cantidades. De este modo el cuerpo humano se acostumbrará a digerirlos.