El vino es la bebida ideal. No sólo tiene múltiples beneficios a la salud, sin contar que tiene un sabor exquisito, sino que además mejora la calidad de muchos alimentos y por supuesto... te hace ver como una persona más sofisticada e interesante. Incluso importante.
A diferencia de la cerveza, que es de carácter más juvenil y festivo, el vino es perfecto para celebrar y conmemorar eventos y acontecimientos importantes: una boda, la apertura de una galería de arte, una graduación, una cena romántica y, claro, una propuesta matrimonial.
Sin dejar de lado que, como toda bebida, debe consumirse con moderación, aquí te damos tips para que consumas de mejor manera el vino y te haga ver como una persona más elegante e interesante:
Tómalo siempre SIEMPRE en copa
Este es el consejo más básico. Y por ende, el principal. Hagas lo que hagas, por favor no consumas vino en un vaso ni mucho menos en un tarro de cerveza. De los recipientes de las licuachelas ya mejor ni hablamos.
Así como el tequila y el mezcal deben ser consumidos en "caballitos", el vino debe ser siempre bebido en una copa. Claro, hay distintas copas para distintos tipos de vino. Por ejemplo, el tinto debe ser consumido en copas anchas y curvas.
El vino blanco, por su parte, debe ser bebido en copas más estrechas y pequeñas, ya que deben mantenerlo frío. Los vinos dulces deben ser bebidos en copas de jerez; mientras que para catar un vino deben usarse copas balón, es decir, en forma de bola y anchas, que permitan meter la nariz y la boca al mismo tiempo, de manera que puedan apreciarse los olores y sabores.
Ahora que ya lo sabes: no tomes vino nunca en un recipiente que sea una copa. O harás el ridículo y espantarás a tu crush.
Aprende a sujetar correctamente la copa de vino
Ahora que ya sabes la importancia de beber el vino en copa, es importante conocer la mejor forma de agarrarla. Los expertos recomiendan que siempre se agarre del tallo y sin mover excesivamente el vino.
Además, se debe de evitar a toda costa poner los dedos en el cáliz (es decir, donde va el líquido) de la copa. En serio, no lo hagas. No hay nada peor que dejar las huellas dactilares marcadas ahí.
Otro consejo es tampoco meter la boca excesivamente en las orillas de la copa, que puede dejar marcas de labial o de comida... y toda la sofisticación que podrías demostrar se perderá.
Eso sin contar que, agarrar correctamente el tallo de la copa, permitirá que la bebida se mantenga a la temperatura adecuada.
Sírvelo a la temperatura ideal
Es falso ese mito de que el vino blanco debe servirse helado y el tinto caliente. Como toda bebida alcohólica, el vino tiene una temperatura ideal para ser degustado.
Los expertos recomiendan que el vino blanco debe servirse ligeramente frío, fresco, sin que sea helado (no es un mojito) en copas más pequeñas y estrechas. Ligeramente frío es la temperatura ideal para que no pierda aromas y sabores.
En tanto, el vino tinto debe degustarse a temperatura ambiente... a menos que la temperatura ambiente sea excesivamente calurosa, por ejemplo, que estemos en el desierto de Sonora, en ese caso sí vale la pena meterlo unos minutos al refri para que se enfríe y se mantenga templado.
Aprende a elegir el mejor vino
Elegir un buen vino es vital. Muy dulce puede parecer un Boing de uva, mientras que extremadamente amargo o con un mal aroma, puede denotar una mala preparación. El vino debe tener aromas y sabores ligeramente dulces, pero al mismo tiempo fuertes y con personalidad.
La clave para elegir un buen vino es buscarlos que sean de regiones cálidas y de climas seco. Es decir, mediterráneas. En México, por ejemplo, Baja California y zonas del Bajío tienen esas condiciones mediterráneas. Lo mismo que Italia, España y el sur de Francia. Revisar la etiqueta igual es indispensable, así como el corcho: un corcho largo, por ejemplo, significa que es un vino diseñado para almacenarse por largo tiempo.
Otro tip es investigar la cosecha del vino para determinar sin en esa época hubo climas adversos o plagas; así como moverlo ligeramente para ver que no tenga burbujas. Sin un vino genera burbujas es porque hay levaduras vivas.
Las burbujas solamente se permiten en vinos rosados y blancos muy jóvenes.
Elige los mejores alimentos para acompañarlo
Otra clave para aprender a tomar vino como un profesional e impresionar a tus amistades, familiares y parejas, es saber qué tipo de alimentos deben de combinarse con cada tipo de vino.
Por ejemplo, los quesos van muy bien con todos los tipos de vino. Pero hay tipos de queso que funcionan mejor. Los quesos grasos, como el roquefort, van mejor con el tinto, mientras que los quesos de pasta blanda, como el brie o el mozzarella, funcionan mejor con un vino blanco o un vino joven.
Los cortes finos de carne roja siempre van muy bien con un buen vino tinto; los mariscos y la comida del mar, por otra parte, potencia mejor su sabor con un vino tinto.
Respecto a las carnes de aves, si se trata de embutidos, la opción es el vino blanco; mientras que los guisos de pollo y pavo van bien con tintos y vinos jóvenes. En aves de caza, como patos o faisanes o perdices, un buen vino tinto es la opción idónea.
Ahora que ya sabes todos estos consejos, es momento de que invites a tu crush a una cena y la impresiones con tus conocimientos de vino.
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