Los habitantes de Ixmiquilpan, un municipio de escasos 100 mil habitantes y ubicado a 74 kilómetros al noroeste de Pachuca, Hidalgo, creen que dicha zona fue habitada por gigantes, quienes colocaron la 'Piedra de la Campana', un monolito que guarda en su interior una serie de pinturas rupestres que hasta ahora nadie ha podido descifrar, lo que aviva el mito sobre estos seres colosales.
En semanas recientes, los usuarios se han sorprendido ante los supuestos videos de gigantes en México: uno fue visto mientras recorría la cima del cerro de La Cantera, en Atizapán de Zaragoza, Edomex; mientras que otro fue avistado en lo alto de un monte ubicado en la carretera que conecta a Aguascalientes con Lagos de Moreno, en Jalisco.
¿Cuáles son las piedras que colocaron gigantes en Ixmiquilpan?
Don Silviano Pérez, un habitante de Ixmiquilpan, considera que la 'Piedra de la Campana' fue colocada por los uemas, gigantes de entre tres y seis metros de altura, quienes contaban con coronas y llegaron a vivir en cuevas de la región. El testimonio de esta persona fue recogido por María Angélica Galicia Gordillo, académica del Instituto de Investigaciones Antropológicas (IIA) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
La experta de la UNAM afirma que nadie conoce por qué fue colocada una piedra de semejante tamaño y peso (estimado en tres toneladas) en Ixmiquilpan, un lugar donde no se encuentra ningún rastro de arquitectura monumental. Al interior de la piedra se alojan una serie de pinturas rupestres de origen desconocido.
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Para la comunidad otomí, el monolito fue dejado por los uemas (o gigantes) y en realidad era una campana (de ahí su nombre), la cual colocarían en una enorme iglesia. La investigadora de la UNAM también considera que se trata de un "fenómeno significativo" que no puede ser producto del, azar.
Otra de las peculiaridades de la 'Piedra de la Campana' es que al ser golpeada produce dicho sonido, efecto que es conocido como litofonía y que fue usado por los habitantes de la Edad de Piedra para crear los primeros instrumentos musicales. En Toluca, en el Cerro Teresona, hay una piedra que produce tal sonido.
¿Quiénes fueron los uemas o gigantes que habitaron el Valle de México?
Los otomíes narran una serie de leyendas donde aparecen los uemas o seres gigantes que eran "tan grandes como los mezquites", que llegaron a construir grandes edificaciones y enseñaron el arte de la alfarería a las culturas prehispánicas; según estos mismos relatos, desaparecieron en un diluvio que asoló al planeta.
De acuerdo con un relato divulgado por el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, también existen los 'uemalitos', unos seres de baja estatura y de tendencias agresivas, quienes suelen atacar a los hombres que no respetan el legado que dejaron los gigantes; aparte de que ponen en riesgo la vida de las personas con sus travesuras.
Otro de los relatos afirma que los uemas llegaron a hacer alianzas con los toltecas, con la finalidad de subordinar a otras culturas como la otomí. Una de las creencias es que los llamados Atlantes de Tula, ubicados en la zona arqueológica del mismo nombre, fueron inspirados en los gigantes que habitaron en esa zona del país, según cuentan las leyendas.