La detención de seis elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) en el Estado de México prendió las alertas sobre un supuesto “maquillaje” en las cifras de homicidios en la Ciudad de México, sin embargo, el comprobar esto podría verse entorpecido por la falta de comunicación e intercambio de información entre autoridades locales y federales.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), a lo largo del 2022, la capital mexicana registró 747 defunciones por homicidio. Por otro lado, cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), señalan que la entidad contabilizó 709 homicidios dolosos, es decir, existe una diferencia de 38 casos.
En 2021, el Inegi registro mil 76 defunciones por homicidio en CDMX, mientras que el Secretariado registró 921 homicidios dolosos.
No obstante, el Inegi clasifica las defunciones en 5 categorías:
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-Por causas externas
-Presunto homicidio
-Presunto accidente
-Presunto suicido
-Evento de Intención No Determinada
El Instituto indicó que la CDMX resguardó mil 549 defunciones en donde no se pudo determinar las causas de la muerte. Cabe mencionar que en los certificados de defunción, el o la médico debe especificar las causas, en ocasiones, los especialistas de la salud tienen acceso a los cuerpos, pero carecer de información en torno a los hechos podría perjudicar el reporte, o en su defecto, las investigaciones en torno al caso.
Según el Manual de Llenado del Certificado de Defunción 2022, el documento está conformado por una versión original y tres copias. La primera y dos de sus réplicas deben ser entregadas al Registro Civil para obtener el Acta de Defunción y el permiso de inhumación en caso de una defunción, o para tramitar el permiso de inhumación en caso de una muerte fetal.
La primera copia del Certificado debe ser entregada por el Registro Civil al INEGI, institución responsable de su custodia. La segunda queda bajo resguardo del Registro Civil.
La tercera debe conservarse en la unidad médica del SNS que certificó la defunción para garantizar la integración de la información correspondiente en el Subsistema Epidemiológico y Estadístico de Defunciones (SEED), de conformidad con los términos establecidos por la Secretaría a través de la DGIS, así como para cotejar la información requerida por los Sistemas Estatales de Salud (SESA).
“El Certificante debe asentar en el Certificado de Defunción la presunta intencionalidad del evento y detallar las circunstancias en las que este ocurrió, de acuerdo a la información disponible al momento de la elaboración del reporte”, se lee en el apartado 12.2.7.5.2 del Manual.
Bajo ese tenor, aún hay 38 casos de homicidios dolosos en CDMX que el Secretariado registró y que el Inegi no tiene los certificados de defunción de las personas fallecidas.
Con base en la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades y Problemas Relacionados con la Salud (CIE-10), en el apartado Y22, las muertes por disparos de arma corta, de intención no determinada, entran en la categoría Evento de Intención No Determinada.
¿CDMX 'maquilla' cifras de homicidios?
En octubre del presente años, elementos de seguridad de la CDMX fueron detenidos en el Estado de México por el traslado de tres personas con heridas de arma de fuego a un hospital en territorio mexiquense, pese a que la agresión ocurrió en la alcaldía Iztapalapa.
En aquella ocasión, la SSC transportaron a los heridos a un hospital mexiquense “con su autorización”, con el fin de “perseverar la vida”. Entre los afectados se encontraba un elemento de seguridad que, cuando se dieron los hechos, se encontraba en su día de descanso.
Reportes de la prensa local señalan que, al ser detenidos, los elementos de seguridad declararon que llevaron a los heridos a territorio mexiquense para "bajar los índices delictivos" en la capital mexicana.
Este hecho se dio a la par que Ernestina Godoy, titular de la Fiscalía General de Justicia de la CDMX, busca mantener en el cargo para un segundo periodo, sin embargo, los números no le favorecen, pues la ciudad registró 228 mil 874 casos sin resolver a lo largo de 2022.