La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, lamentó que el consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), Ciro Murayama, vaya a participar en una conferencia de Sí Por México, espacio donde también participarán los panistas Xóchitl Gálvez y Santiago Creel, por lo que consideró que no hay árbitro electoral.
Durante una conferencia de prensa, Sheinbaum dijo que lo hecho por el consejero Murayama es la demostración de que "no son árbitros, se pusieron la playera y se pusieron a jugar de un lado".
Te podría interesar
En ese mismo sentido, la jefa de Gobierno recordó que Lorenzo Córdova, consejero presidente del INE, asistió a una reunión con el grupo parlamentario del PAN, "y ahora otro consejero", remarcó sobre Ciro Murayama, con quien tuvo una serie de diferencias por un desplegado a favor del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO).
No me permiten hablar y al mismo tiempo participan en eventos de partidos políticos", señaló Claudia Sheinbaum.
Pidió a los consejeros señalados que se salgan del órgano electoral y participen un partido político, ya que según Sheinbaum, están en contra de la Cuarta Transformación y del presidente López Obrador. Consideró que no se trata de un tema menor al tratarse del INE.
"Me da risa la crítica del presidente (del INE) cuando tiene un consejero que participa en un evento de un partido político... o él mismo", remarcó la mandataria capitalina, quien pidió ser citada con la frase "¿Dónde quedó el árbitro?".
Criticó a los "partidos conservadores" de no querer participar en la Revocación de Mandato, consulta que se llevará a cabo el 10 de abril, pero sí criticar. Recordemos que ayer el INE resolvió que las fuerzas políticas no pueden participar en la etapa de difusión y su labor se limitará a tener observadores el día de la jornada.
Los desencuentros entre Claudia Sheinbaum y Ciro Murayama iniciaron desde que el INE le pidió eliminar un comunicado a favor de la Cuarta Transformación, debido a que violaba la veda electoral por la Revocación de Mandato, algo en lo que la mandataria capitalina no estuvo de acuerdo y agregó que no "borrarían sus convicciones".