El Tren Maya es la infraestructura ferroviaria más importante de México, y uno de los principales proyectos de la actual administración. Pero ¿sabías que tuvo su antecesor? Efectivamente, se trata del Tren o Ferrocarril del Sureste, que comunicó primero internamente a la Península de Yucatán y luego con el resto del país.
Desde principios del siglo XX se impulsaron diversos proyectos para construir una línea en el sureste mexicano, con el propósito de extender la línea de los Ferrocarriles Unidos de Yucatán o de conectarla con el sistema ferroviario del centro de México. Uno de ellos fue la creación de la compañía Ferrocarriles Sud Orientales que se propuso enlazar la línea yucateca con Quintana Roo.
En un principio, el sistema ferroviario de la península estuvo dedicado a la conexión interna. A pesar de que la red incluía gran parte del territorio peninsular, no existió una línea que la comunicara con otras partes de México. Esto cambió con la construcción del Ferrocarril del Sureste, que unió los territorios de Yucatán, Campeche, Quintana Roo, Chiapas, Tabasco y Veracruz.
Surgimiento del Tren del Sureste
Los antecedentes del Tren del Sureste se remontan a principios del siglo XX, cuando el ingeniero Pedro González hizo los primeros estudios de reconocimiento para trazar una línea que uniera algunos puntos de la región. No fue sino hasta el periodo presidencial de Lázaro Cárdenas del Río, con el Programa de Integración Nacional, cuando los trabajadores de Ferrocarriles Nacionales de México (FNM) realizaron estudios preliminares para definir la ruta del Ferrocarril del Sureste.
En 1936, los trabajos se intensificaron para la construcción del Tren del Sureste, que incluyó la reconstrucción de obras de drenaje, el refuerzo de terraplenes, la nivelación de vía, la ampliación y la reparación de puentes, así como el balastado de vía, la sustitución de durmientes en mal estado, el cambio de riel en donde era necesario y la construcción de puestos de socorro para los trabajadores.
Luego de 14 años de construcción, en mayo de 1950 se puso en servicio la primera parte de la línea, la que iba de Coatzacoalcos a Campeche. La inauguración de la línea del sureste por el presidente Miguel Alemán significó la consolidación del sistema ferroviario y la integración de la Península Yucateca con el resto del país.
Desaparece el Tren del Sureste
Desde entonces, se ofreció un servicio continuo y sin interrupciones, que transportaba ganado, frutas y pasaje, en medio de una selva que hasta entonces había estado prácticamente deshabitada. Las obras de infraestructura del Tren continuaron durante la década de los 70.
En 1977, por disposición del entonces presidente José López Portillo, los Ferrocarriles del Sureste quedaron bajo el mando del gobierno federal y pasaron a denominarse Ferrocarriles Unidos del Sureste.
No fue sino hasta el sexenio del presidente Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-200) que inició la privatización de los FNM, que terminó privatizando los ferrocarriles de México y el Ferrocarril del Sureste pasó a manos de Carlos Slim Helú, primero, y Germán Larrea Mota Velasco, después.
En noviembre de 2005, Grupo México, de Germán Larrea, obtuvo el 75 por ciento de las acciones de Ferrosur, que formó parte del complejo Ferromex, cuyos trenes se dedican al transporte de carga. Ahora, para conectar al sureste mexicano y transportar pasajeros, la llamada Cuarta Transformación encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, construyó una de sus obras emblemáticas, el Tren Maya.
Con información del Gobierno de México y Revista Digital.