Es un esquema para que los recursos de la verificación vehicular de Gobierno del Estado, se destinen a acciones que impacten de manera positiva en el medio ambiente.
“Ahora el dinero entra como caja chica directamente al Gobierno del Estado; cuando las contribuciones de las verificaciones son pagadas el dinero entra directamente a Sefiplan, es decir, no tienen un destino fijo”.
Hermida informó que fue en el 2019 cuando desaparecieron este Fideicomiso en donde había 344 millones de pesos disponibles en el Fondo Ambiental Veracruzano y que quedaron a libre disposición del Gobierno del Estado.
Argumentó que hoy en día lo recaudado se utiliza para el gasto corriente, es decir el pago de nómina, de representación, viáticos y comidas de los funcionarios estatales.
En ese sentido aseveró que el dinero de las verificaciones va a parar al bolsillo de burócratas.
Señaló que dos proyectos serían la rehabilitación de las lagunas de El Encanto y la Olmeca del puerto de Veracruz.