Autoridades de Protección Civil confirmaron el hallazgo de cuatro cadáveres en los márgenes del Río Los Pescados, quienes eran originarios de Villa Aldama y perecieron ahogados en la zona de Jalcomulco.
Los cuerpos de dos de ellos fueron encontrados el lunes, mientras que los otros dos aparecieron el martes por la tarde en la región de Apazapan.
Lo anterior radica bajo el número de carpeta de investigación COA/DXII/508/F5/2022, donde se especifica que la tarde del lunes pasado, los comerciantes identificados como Miguel Ángel, Carlos y Daniel de apellidos Cruz Gabriel (todos ellos hermanos) y un trabajador, de nombre Alexander N, de 18 años, viajaban a bordo de una camioneta y pasaron a la comunidad de Carrizal, para comprar alimentos y bebidas. Al realizar la compra, en Cerro Gordo, tomaron hacia Jalcomulco donde fueron vistos por última vez.
Según consta en la investigación, Alexander de 18 años se introdujo al agua en un área conocida como “La Playita”, pero por la fuerza de la corriente fue arrastrado. Al percatarse de la situación, Daniel Cruz Gabriel se lanzó para rescatarlo pero también fue arrastrado por la corriente.
Carlos Cruz Gabriel, tomó entonces una cuerda que traían en la camioneta y se las lanzó para que se sujetaran, pero cuando hizo la maniobra de salvamento, resbaló y cayó también al afluente.
Por último, Miguel Ángel Cruz Gabriel intentó ayudar a su hermano Carlos, pero también fue arrastrado por el caudal, entonces Saúl “N”, un trabajador de la construcción que pasaba por el lugar, reportó el hecho al 911 para pedir auxilio, pero fue demasiado tarde pues los cuatro comerciantes habían desaparecido, iniciando la búsqueda personal de Protección Civil Municipal de Jalcomulco.
Los cuerpos de Miguel Ángel y de Carlos Cruz Gabriel fueron rescatados y traídos a la superficie, mientras que los cadáveres de Daniel y Alexander fueron hallados durante el martes, por brigadistas que los localizaron río abajo, a ocho kilómetros del lugar de la tragedia a la altura de la comunidad de Coetzalan, ya en el municipio de Apazapan.
Los cadáveres fueron levantados por un perito criminalista de la fiscalía de Coatepec en el margen del río y trasladados al Servicio de Medicina Forense, para la práctica de la necropsia de rigor.
Finalmente y tras el formal reconocimiento por parte de sus familiares, trascendió que todos vivían en la cabecera municipal de Villa Aldama y se dedicaban al comercio de zapatos en el estado de Veracruz y en León Guanajuato.